Asia

Pakistán mata a 54 insurgentes que intentaban entrar al país y que relaciona con la India

Según el comunicado del Ejército, "este grupo de insurgentes se infiltraba a instancias de sus 'jefes extranjeros' para llevar a cabo actividades terroristas de alto perfil en Pakistán"

India/Pakistán.- El Consejo de Seguridad condena el atentado en Cachemira y pide a los Estados colaborar con la Justicia
El atentado de Cachemira ha desatado la tensión entre India y PakistánEuropa Press

El Ejército paquistaní afirmó este domingo que en las últimas 48 horas acabó con la vida de 54 supuestos insurgentes que intentaron entrar a Pakistán desde la frontera con Afganistán, y que acusó de estar respaldados por la India, en medio de la escalada de tensión entre ambas potencias nucleares.

"Gracias a una intervención precisa y hábil, los 54 insurgentes fueron asesinados", indicó en un comunicado la oficina de medios del Ejército paquistaní, que acusó a la India de brindar apoyo a los insurgentes.

"Estas acciones de Fitna al Khwarij (FAK) -como Islamabad denomina desde el año pasado a los talibanes paquistaníes-, en un momento en que la India lanza acusaciones infundadas contra Pakistán, revelan claramente bajo qué órdenes opera el FAK", aseguró el Ejército.

Los intentos de infiltración se produjeron las dos últimas noches en el distrito tribal de Waziristán del Norte, ubicado en la provincia noroccidental de Khyber Pakhtunkhwa.

Según el comunicado del Ejército, "los informes de inteligencia indican que este grupo de insurgentes se infiltraba específicamente a instancias de sus 'jefes extranjeros' para llevar a cabo actividades terroristas de alto perfil en Pakistán".

El Gobierno paquistaní comenzó a referirse al Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), los talibanes paquistaníes, como Fitna al Khwarij (FAK) hace un año en un intento de demostrar que no son musulmanes -Khwarij hace referencia a militantes extremistas-.

El TTP es una de las principales amenazas para la seguridad en el país, especialmente en Khyber Pakhtunkhwa.

Esta operación se produce en un momento de creciente tensión diplomática entre la India y Pakistán. El Gobierno indio acusa a Islamabad de estar detrás del ataque terrorista que tuvo lugar el pasado martes en la Cachemira controlada por la India, en el que murieron 25 indios y un nepalí, la mayoría turistas.

Islamabad niega estar involucrado en el ataque y ha pedido una investigación neutral del incidente. Según el comunicado del Ejército, las acusaciones de la India buscan ofrecer un respiro a la insurgencia en Pakistán.

En el marco de la escalada de tensiones, ambos Gobiernos han rebajado significativamente sus relaciones bilaterales, ordenando la expulsión de diplomáticos, la revocación de visados de ciudadanos del otro país en su territorio y el cierre de la frontera terrestre mutua.

Pero además, la India ha suspendido el Tratado de Aguas del Indo, firmado en 1960, y que hasta esta semana había sobrevivido a guerras y enfrentamientos entre ambos países.