Oriente Medio

Rubio cierra filas con Tel Aviv tras el ataque a su aliado qatarí

El secretario de Estado pide al emirato del Golfo que continúe sus esfuerzos de mediación para poner fin a la guerra en Gaza

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, recibe en Jerusalén al secretario de Estado de Estados Unidos, Marco RubioREMITIDA / HANDOUT por GOBIERNO DE ISRAELFotografía remitida a medios de comunicación exclusivamente para ilustrar la noticia a la que hace referencia la imagen, y citando la procedencia de la imagen en la firma15/09/2025
Benjamin Netanyahu recibe a Marco Rubio, ayer en JerusalénGOBIERNO DE ISRAELEuropa Press

Tras una reunión a la que asistieron ministros israelíes y representantes de la Administración estadounidense, entre ellos el secretario de Estado, Marco Rubio, y el primer ministro, Benjamin Netanyahu, ambos ofrecieron una conferencia de prensa en la que abordaron los ataques israelíes contra Qatar de la semana pasada y la guerra en Gaza.

Preguntado sobre si creía posible el desmantelamiento de Hamás, Rubio respondió que, aunque improbable, sería lo deseable: «Ese sería el resultado ideal que todos desearíamos. Se ha trabajado en ello, pero creo que debemos estar preparados para el hecho de que los terroristas salvajes no suelen aceptar este tipo de cosas. Sin embargo, seguiremos buscando esa vía. Es el resultado ideal, pero podría requerir una operación militar concisa para eliminarlos».

A Netanyahu le preguntaron sobre la posible expansión de la actividad militar israelí en la Ciudad de Gaza, y el mandatario dijo que, si bien se niega a detallar planes tácticos, los objetivos son los cinco principios que, según él, fueron establecidos por el Gabinete de seguridad: el desarme de Hamás, la liberación de los rehenes aún cautivos, la desmilitarización completa de la franja, que Israel se ocupe de la seguridad para garantizar que no haya un resurgimiento del terrorismo y el establecimiento de un gobierno civil de transición integrado por personas «que no propugnen la destrucción de Israel y que no eduquen a sus hijos en el terrorismo, ni lo financien, ni lo impulsen».

Sobre el ataque contra el liderazgo de Hamás en Doha (Qatar), aliado de EE UU, Netanyahu reiteró que el ataque fue una «decisión totalmente independiente de Israel, mía y de nuestros principales jefes de las fuerzas de seguridad. Lo llevamos a cabo nosotros y asumimos toda la responsabilidad porque creemos que no se debe dar refugio a los terroristas, y quienes planearon la peor masacre del pueblo judío desde el Holocausto no deben tener inmunidad».

En cuanto a los resultados del ataque, que Israel en un principio acogió como un éxito y luego se fue desinflando a medida que fuentes de seguridad empezaron a dudar de haber matado a los líderes del politburó islamista, dijo: «Bueno, aún estamos recibiendo los informes finales. Les diré cuál es el impacto del ataque. Enviamos un mensaje a los terroristas: pueden correr, pero no pueden esconderse, y los atraparemos».

«Creen que gozan de inmunidad, lo harán una y otra vez, y si se les niega esa inmunidad, se lo pensarán dos veces», añadió el primer ministro israelí, amenazando a los líderes de Hamás que se esconden en París, Jordania u otros países.

Cuando un periodista preguntó al secretario de Estado el grado de conocimiento previo de su Administración del ataque a Hamás, Rubio eludió responder diciendo que «estamos centrados en lo que suceda después».

En la rueda de prensa, Netanyahu también criticó el «inmenso cinismo e hipocresía» de quienes atacaron a Israel por tratar de matar a los altos cargos de Hamás en el exilio y mencionó la resolución 1373 de la ONU, ratificada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE UU, que establece que ningún país puede albergar ni dar refugio a terroristas. El primer ministro enfatizó que, tras aquellos atentados, EE UU «actuó con mucha audacia contra los refugios terroristas que se le otorgaron a Al Qaeda en Afganistán. El refugio terrorista que se le otorgó a [Osama] Bin Laden en Pakistán».

Previamente, Rubio se había encontrado a solas con Netanyahu durante aproximadamente una hora y media antes de una reunión ampliada con los asesores de ambos, unas 18 personas con solo tres mujeres en las comitivas, dos estadounidenses y una israelí. El día antes, ambos políticos visitaron el Muro de las Lamentaciones, donde las periodistas mujeres no pudieron acceder para hacer su trabajo bajo el argumento de que los hombres iban a rezar en el lugar.

Rubio inauguró un camino recién excavado de la Ciudad de David, un sitio arqueológico de gran importancia para el judaísmo situado en la Colina Oriental, establecido por un grupo de colonos judíos en el barrio palestino de Silwan en la Ciudad Vieja. Dijo que era un honor «inaugurar y abrir al mundo quizás uno de los sitios arqueológicos más importantes del planeta, uno que tiene un profundo significado para tanta gente en EE UU también».