Oysho lanza un vestido moldeador con toques tan noventeros que nos recuerda a los que llevaba la mítica Rachel de Friends

Que estamos viviendo un revival de la moda de la década de los 90 es algo que a estas alturas no puede ya negar nadie. Solo hay que echarle un vistazo a Instagram para darnos cuenta cómo las cuentas más nostálgicas publican casi diariamente fotos de inspiración de looks míticos de alfombra roja o de calle de referentes de aquellos años, como Julia Roberts con sus vaqueros rectos y camisetas blancas, los vestidos minimal y de aire lencero de Kate Moss o los estilismos casi siempre negros de Winona Ryder. Y es que muchos de ellos están marcados en nuestra retina y pase el tiempo que pase seguimos acudiendo a esas instantáneas para buscar algún detalle con el que conseguir ese estilo tan desenfadado y a la vez favorecedor.

Hay muchas conversaciones sobre cuánto debe pasar para que las prendas de una época puedan ser consideradas vintage, aunque el consenso general parece haber establecido el límite en 20 años. Y esto se puede apreciar claramente dándonos una vuelta por las tiendas de ropa de segunda mano (o vintage) donde sus percheros se empiezan a llenar de codiciados modelos de John Galliano o Jean-Paul Gaultier de aquellos años, que las expertas en moda se han lanzado a comprar. Solo hay que echar un vistazo a la última alfombra roja del Festival de Cine de Cannes.

Pero además de los cortes depurados y patrones sencillos, la moda de entonces se caracterizaba especialmente por una clara apuesta por la comodidad y lo deportivo. Fue el primer paso para sacar las zapatillas de deporte fuera del gimnasio o las canchas, así como ciertas prendas tradicionalmente del vestuario atlético. El precedente de lo que hoy día conocemos como “Athleisure”, que por si alguien no lo sabe todavía es la tendencia de llevar la ropa deportiva a la calle y en el día a día.

Pues esto mismo ha debido tener en mente Oysho, que con una apuesta cada vez mayor por la equipación deportiva ha incluido en su nueva colección un vestido que cumple una triple función, trasladarnos a aquella década, ser cómodo y de aire sport y a la vez definir la silueta gracias a su mono interior comprensivo. Y es que si Kim Kardashian ha conseguido hacer de sus fajas reductoras todo un imperio será por algo.

El modelo en cuestión viene en dos colores (blanco o negro) y con dos tipos de tirantes (finos o un poco más grueso) y en la campaña de la marca tienen la inspiración tan clara que no han dudado en combinarlo con deportivas. Pero ojo que también nos invitan a lucirlo para actividades como el yoga o incluso jugar al tenis. Aunque lo cierto es que al verlo no hemos podido evitar que acudiese a nuestra mente un referente de estilo de los 90, que fue máxima valedora de este tipo de modelo. Sí, hablamos de nuestra querida Rachel de la serie Friends. Y es que cuánto tiene que agradecerle la moda a aquella Jennifer Aniston.

Vestido compressive tirantes, de Oysho (29,99 euros)

Vestido compressive de tirante ancho, de Oysho (29,99 euros)