¿Qué ha sido de los Ángeles más famosos de la época dorada de Victoria’s Secret?

Durante muchos años los famosos desfiles de la marca americana de lencería más famosa del mundo parecían marcar el canon del cuerpo perfecto establecido por la sociedad del momento. Las deseadas medidas 90-60-90 eran la aspiración no solo de las modelos, si no también de la mayoría de las mujeres, pero especialmente de todas las chicas jóvenes, que veían en esos cuerpos esculturales el símbolo del éxito y de la belleza. Tras muchos años de lucha y de concienciación social, tanto las marcas como el público en general empezaron a entender que la aceptación de nuestros cuerpos es un paso fundamental para la evolución de cualquier sociedad.

En consonancia con este avance, la popularidad de Victoria’s Secret fue decayendo, convirtiéndose para muchos en una marca arcaica y discriminatoria. Especialmente cuando con el fenómeno curvy, la firma incluyó modelos como Taylor Hill bajo esa etiqueta, a pesar de tener un cuerpo más parecido al de sus predecesoras. Y tras el rechazo del consumidor, otras marcas como Fenty, la firma de lencería de Rihanna, aprovecharon ese vacío para llenarlo con cuerpos inclusivos, de todas las tallas y colores.

Pero entonces, ¿ya no hay cabida en el mundo de la moda para aquellos famosos Ángeles, que lucían alas y sujetadores llenos de diamantes? Pues parece que sí, y cada una ha sabido hacer su carrera de una manera totalmente diferente. Desde Heidi Klum, quien a sus 48 años sigue luciendo el mismo cuerpo envidiable que la convirtió en la reina de las pasarelas, pasando por Karlie Kloss, que colgó sus alas por la informática y las nuevas tecnologías. Otras como Tyra Banks, quien bien merecería un artículo aparte, han conseguido encontrar su sitio a pesar del cambio de su cuerpo, demostrando así que la edad y la evolución no son impedimento para que una se sienta atractiva y sexy.

Ahora, una de las principales precursoras del cambio de medidas perfectas, Kim Kardashian, ha decidido reunir a algunas de las más emblemáticas con motivo de su última campaña para su firma de lencería Skims. Y aunque para muchos esto pueda parecer una vuelta al pasado, lo cierto es que el simple hecho de colocarse ella misma, cuyo cuerpo contrasta con el de sus compañeras de cartel, ya es un sinónimo de diversidad, sin complejos y sin miedos. Porque seamos sinceras, hay que estar muy segura de si misma para posar al lado de Candice Swanepoel, Tyra Banks, Heidi Klum y Alessandra Ambrosio, y el simple hecho de hacerlo nos parece el mejor síntoma de inclusión y normalidad que se puede tener.