Barcelona suspende durante un año la concesión de nuevas gasolineras

El Ayuntamiento de Barcelona ha suspendido la concesión de nuevas licencias de gasolineras en toda la ciudad durante un año. La idea del equipo de gobierno de Ada Colau es elaborar un Plan especial urbanístico para ordenar su instalación y reducir las molestias a los vecinos.

El Ayuntamiento de Barcelona ha suspendido la concesión de nuevas licencias de gasolineras en toda la ciudad durante un año. La idea del equipo de gobierno de Ada Colau es elaborar un Plan especial urbanístico para ordenar su instalación y reducir las molestias a los vecinos. Los únicos ámbitos que quedarán exentos serán los suelos industriales de la Zona Franca, la Verneda Industrial, el Torrent d’Estadella y el Bon Pastor; además de la zona portuaria, siempre que la gasolinera esté a más de 100 metros de equipamientos y viviendas.

El objetivo de la iniciativa es evitar los impactos negativos y las molestias que este tipo de instalaciones pueden causar en el entorno urbano, garantizar la adecuada integración de la actividad en el entorno y preservar el descanso de los vecinos.

Más de cien gasolineras

Aunque no lo parezca y en el marco mental de muchos ciudadanos existe la idea de relacionar gasolinera con vías interurbanas, actualmente, el término municipal de la ciudad de Barcelona cuenta con más de un centenar de gasolineras en funcionamiento.

Con la suspensión de la concesión de licencias, que se publicó ayer en el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona (BOPV), se quiere evitar que durante la redacción de la normativa haya un incremento de solicitudes de licencias contrarias a los objetivos del propio plan.

El pasado 14 de marzo, la comisión municipal de Ecología, Urbanismo y Movilidad acordó de fecha de 2018 acordó de modificar el planeamiento urbanístico con el objeto de introducir una regulación específica destinada a la implantación de estaciones de suministro de carburantes para vehículos motorizados, en todas sus tipologías y de aplicación en todo el territorio municipal.

En el mismo comunicado, el Consistorio explicó que la actual legislación permite que se instalen gasolineras «sin excesivas dificultades y sin tener en cuenta el entorno urbano donde se ubican», aunque provocan molestias como ruido, olores y una gran afluencia de vehículos.

La suspensión por un año de la concesión de licencias para el ejercicio de nuevas actividades de gasolineras o la ampliación de las existentes, incluye la concesión de licencias y admisión de comunicados para la realización de obras destinadas a la implantación o ampliación de las actividades de gasolinera o suministro de carburantes para vehículos propios.

El ámbito de suspensión de licencias y obras abarca íntegramente la ciudad de Barcelona, a excepción de los suelos industriales situados en la Zona Franca, la Verneda Industrial, el Torrent d’Estadella y el Bon Pastor, así como de aquellas gasolineras que se quieran ubicarse en suelos portuarios.

En estos casos sólo se podrán conceder licencias si la nueva gasolinera está a más de 100 metros de hospitales, instalaciones escolares, destinados a las personas mayores u otros sectores de población especialmente vulnerables y de cualquier suelo donde haya implantado o pueda implantarse el uso de vivienda.