«La inmersión monolingüe nunca ha sido avalada por Europa»

Convivencia Cívica Catalana desmiente los tópicos más extendidos sobre el polémico modelo educativo catalán.

Convivencia Cívica Catalana denuncia en su informe «Las mentiras de la inmersión» las falacias que se vierten desde el nacionalismo sobre el sistema educativo catalán y niega tajantemente que la inmersión haya sido avalada por Europa en la forma en que se aplica en Cataluña.

El Consejo de Europa ha advertido que, al igual que en Quebec, la inmersión en Cataluña debería ser voluntaria y los padres deberían tener derecho a decidir, algo que los políticos nacionalistas les niegan.

Por ello, esta entidad pide honestidad en su informe dirigido a los defensores de la inmersión monolingüe en catalán y rebate con cifras y argumentos las cinco consignas más repetidas.

«Es un modelo de gran éxito, está avalado por Europa, con sólo dos horas de castellano dominan más que el resto de España, es un ejemplo de integración de los inmigrantes o hay un consenso social amplísimo” son algunas de las mentiras que se vierten desde el nacionalismo catalán» señalan en este documento.

Francisco Caja, presidente de esta entidad, afirma «Llevamos desde el año 93 luchando por este tema, es más el informe se publicó ese año y nunca ha habido voluntad de acabar con la inmersión lingüística» y añade «somos conscientes de que no vamos a convencer a los nacionalistas pero, por lo menos, queremos que la opinión pública tenga conocimiento de lo que está sucediendo en Cataluña».

En este documento se pone de relieve que entre la ciudadanía de Cataluña no existe ningún consenso social a favor de la inmersión, como muchas veces se repite. De acuerdo a las encuestas tanto públicas como privadas, apenas un 14% de catalanes es favorable a un modelo de enseñanza como la actual inmersión lingüística obligatoria, con todo en catalán.

Debido a la inmersión los niños castellano hablantes fracasan el doble que los catalanohablantes. La inmersión no es ningún modelo de cohesión social sino que es claramente discriminador respecto a los castellanohablantes que deben sumar a la dificultad de aprender, la dificultad de no dominar el idioma.

Para seguir, la inmersión tampoco es un modelo de integración de los inmigrantes. De acuerdo a los datos de PISA precisamente el sistema educativo catalán es el que consigue una menor integración del alumnado inmigrante en la escuela de todas las autonomías de España. Para muchos niños inmigrantes, en particular, de origen hispanoamericano, la imposición del catalán es un obstáculo para su integración lo que se refleja en sus malos resultados en Cataluña en comparación con el resto de comunidades autónomas.

Por último, sería muy sorprendente que en Cataluña con sólo 2 horas a la semana de castellano se tuviera el mismo dominio de castellano que con 25 o 30 horas en el resto de España. La realidad es que, en cuanto al nivel ortográfico, sólo un 33% de los alumnos catalanes de ESO son capaces de transcribir un texto en castellano a nivel básico, con dos o menos faltas. En el conocimiento de periodos, autores y obras de literatura española, la media obtenida por los alumnos catalanes es de un 35% de aciertos frente al 79% de los alumnos del resto de España.

El PSC presentará más de 300 mociones para defender la inmersión lingüística

El secretario de política Municipal del PSC, Jaume Collboni explicó este lunes que su grupo parlamentario llevará a más de 300 ayuntamientos catalanes una moción para defender el modelo de la inmersión lingüística ante la «ofensiva de la derecha, de PP y C's. En su comparecencia antes los medios en la Escola Industrial recordó que el PSC tiene grupo municipal en más de 300 ayuntamientos, ostenta más de 100 alcaldías y es la primera fuerza en el Área Metropolitana de Barcelona. «estamos orgullosos de tener dos lenguas y la escuela es una fuente de cochesión social y de igualdad de oportunidades» destacó Collboni. Por esta razó presentará una moción en defensa del en defensa del modelo lingüístico que consta de cinco puntos y en la que los socialistas se oponen a «cualquier instrumentalización de la escuela o de la lengua con fines electoralistas.

«los independentistas nos tienen acostumbrados a mociones para dividir y señalar, nosotros queremos sumar» señaló.

Además este texto reivindica la «plena confianza en la profesionalidad de los docentes y del cuerpo de inspectores, a la vez que rechaza cualquier desviación de los objetivos pedagógicos».

Por ello, este documento insta al futuro Govern a velar por el cumplimiento de las leyes catalanas y la excelencia del sistema educativo y traslada la defensa del modelo actual al resto de instituciones gubernamentales, tales como el Congreso o el Senado.