Valencia

Sánchez da un plazo de cuatro años para la nueva financiación

El secretario general del PSOE apuesta en Valencia por la defensa de España y vuelve a pedir la movilización de los votantes de izquierda para poder ganar con contundencia

El secretario general del PSOE y presidente en funciones del Gobierno, Pedro Sánchez, ayer junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicealcaldesa y portavoz socialista, Sandra Gómez. KIKE TABERNER
El secretario general del PSOE y presidente en funciones del Gobierno, Pedro Sánchez, ayer junto al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicealcaldesa y portavoz socialista, Sandra Gómez. KIKE TABERNERlarazon

El secretario general del PSOE apuesta en Valenciapor la defensa de España y vuelve a pedir la movilización de los votantes de izquierda para poder ganar con contundencia

El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, llegó a Valencia sin los deberes hechos.

En el tercero de sus mítines de precampaña electoral no se comprometió a dar una fecha con creta para el nuevo sistema de financiación que reivindica la Comunitat Valenciana para mejorar los servicios a la ciudadanía.

En cambio, reivindicó el sentimiento de españolidad y de Estado que representa, según dijo, su partido: el PSOE que lleva en su siglas la E de «una España que no se queda en la bandera, sino en educación pública, empleo digno, emancipación de la gente joven o ecología».

Y también defendió la unidad de España frente al independentismo de Cataluña. «Nosotros defendemos que tiene que haber ley y diálogo para acabar con los enfrentamientos». Pidió a los independentistas que reconozcan su fracaso.

Al resto de partidos les confirió a estar unidos en torno a la Constitución, al tiempo que acusaba al Gobierno catalán de ser insolidario con las regiones más pobres del país.

Ninguno de los líderes socialistas que participaron en el mitin reconocieron la responsabilidad de su partido en la imposibilidad de formar gobierno y echaron balones fuera acusando a todos de ser los culpables del nuevo proceso electoral. Sánchez habló de una campaña electoral en positivo y dejó al ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, las acusaciones a Unidas Podemos de bloquear la posibilidad de un gobierno de izquierdas.

Para conformar al público de incondicionales que se reunió en el Centro Cultural la Petxina de València lanzó un pequeño regalo. Las liquidaciones a cuenta prometidas por la ministra Montero, llegarán a las arcas de la Generalitat antes del 10N. Un caramelo para poder aportar algo de esperanza al Consell del Botànic, especialmente a Compromís que, como ya han anunciado, hará de la reivindicación de una nueva financiación autonómica más justa par a los valencianos, su bandera en la campaña electoral.

Y al final de su intervención habló de financiación pero sin anunciar nada nuevo. Evidenció que el interés por la reforma no es demasiado, al darse un plazo de cuatro años, una legislatura completa, para abordarlo.

El presidente Ximo Puig, tampoco quiso utilizar este tema en el mitin y se limitó a agradecer el «esfuerzo» que ha hecho el Ejecutivo en funciones para hacer llegar el dinero de las liquidaciones a cuenta.

Eso sí, el president de la Generalitat, criticó que los partidos del arco parlamentario no dieran su apoyo a unos Presupuestos del Estado que dijo «eran los mejores para los intereses de los valencianos». Y también reivindicó para los socialistas la utilización del nombre de España como bandera «de la solidaridad, de la igualdad y de los valores democráticos».

Pedro Sánchez hizo referencia a la aparición de Íñigo Errejón en las elecciones nacionales e incidió en que la aparición de nuevos partidos en la escena política «hace más evidente que nunca que el PSOE es necesario para formar un Gobierno fuerte».