Política

Desahucio

Los asaltantes de Villalba se hacen fuertes

El edificio en el que se han instalado es propiedad de una entidad bancaria que no ha denunciado

La Razón
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Madrid- Entre los diferentes problemas que están generando el grupo de okupas instalado en el municipio de Villalba desde el pasado mes de agosto están los asaltos al supermercado Día situado a sólo unos metros de la casa en la que se han instalado, la música alta a cualquier hora del día, la suciedad y por último lo que, aún si cabe, desespera más a los vecinos: que no parece que la ocupación tenga un final cercano.

El motivo es que la propiedad del edificio es una entidad bancaria que lo recibió después de que la empresa que lo gestionaba quebrara y fuera embargada.

Desde el Ayuntamiento de la localidad, que dirige el popular Agustín Juárez, se instó ayer al banco a que denunciara la usurpación del bloque de cuatro pisos a estrenar, única vía para el desalojo de los ocupantes, ya que en estos casos la Policía no puede actuar hasta que no recibe la orden judicial que se lo permite. Y para que ésta se produduzca es necesario que los dueños del inmueble denuncien la ocupación.

Juárez explicó ayer que el Ayuntamiento tiene constancia de que el inmueble está ocupado desde agosto y que por este motivo los Servicios Técnicos de Urbanismo realizaron una inspección del mismo, porque éstos sólo pueden ordenar su desalojo si el bloque de pisos presentara problemas arquitectónicos. Sin embargo, Juárez explicó que «los técnicos vieron que la estructura está perfectamente y que tenía las licencias preceptivas».

Juárez añadió que es la segunda vez que animan a la entidad bancaria a denunciar la ocupación del inmueble. Y es que además de haberse apropiado de las viviendas, los okupas tienen atemorizado al barrio. Y más concretamente a los dueños del supermercado más cercano a la casa, ya que tal y como volvió a suceder el jueves, cada cierto tiempo estos jóvenes entran en el establecimiento, llenan un carro de comida hasta arriba y mientras unos sujetan al propietario o a el personal que esté en ese momento trabajando, los otros atraviesan la línea de caja llevándose consigo el carro sin pagar, tal y como ayer explicaban a este diario sus empleadas. El dueño del supermercado denunció ayer al mediodía los hechos que ya investiga la Policía Local de Villalba.