Política

Comunidad de Madrid

Un Madrid «motero» por las limitaciones de tráfico y parking

Las matriculaciones en autoescuelas han aumentado hasta un 25%, mientras que las ventas de vehículos eléctricos se disparan un 285%

El Ayuntamiento de Madrid creará 14.000 plazas de aparcamiento para motos en los próximos 3 años
El Ayuntamiento de Madrid creará 14.000 plazas de aparcamiento para motos en los próximos 3 añoslarazon

Las matriculaciones en autoescuelas han aumentado hasta un 25%, mientras que las ventas de vehículos eléctricos se disparan un 285%.

Los madrileños ya se están haciendo a la idea: tener un coche en Madrid comienza a ser más un perjuicio que un beneficio. La inminente entrada en vigor del Área de Prioridad Residencial (APR) de Madrid Central–con 472 hectáreas del distrito Centro restringidas al tráfico, salvo para residentes–, la consiguiente congestión de vehículos en las zonas fronterizas –como la de los bulevares, desde Génova hasta Alberto Aguilera– y la pérdida de plazas de aparcamiento –sobre todo en la almendra central–, está provocando que los ciudadanos prefieran estar motorizados sobre dos ruedas que sobre cuatro.

Según la Asociación Provincial de Autoescuelas de Madrid, las matriculaciones para obtener el permiso A, que posibilita la conducción de motos de gran cilindrada, han aumentado entre un 20 y un 25% el último año. Del mismo modo, los aspirantes a obtener el A2, que habilita para conducir motocicletas de entre 125 y 400 cc, se han incrementado en un 10%.

Las autoescuelas no disponen de datos sobre el permiso A1, el que autoriza a manejar motocicletas ligeras de hasta 125 cc, ya que lo obtienen automáticamente todos aquellos que aprueban el B, el habilitado para turismos. Sin embargo, como explica a LA RAZÓN Ricardo Cano, presidente de la asociación madrileña, «sí vemos una gran circulación de este tipo de motocicletas en casco urbano. Muchos están utilizándolas para desplazarse al trabajo, sobre todo para el estacionamiento, pues pueden encontrar hueco con mucha mayor facilidad, y evitar congestiones y atascos».

Ahora bien, como recuerda Cano, las motos, al igual que los turismos, van a tener muy limitado su acceso a Centro el próximo mes de noviembre, cuando entre en vigor la nueva APR. «Salvo si son motocicletas eléctricas» y, por tanto, de cero emisiones, puntualiza.

En este sentido, los madrileños han tomado nota. Según los datos facilitados a este diario por la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor), el mercado eléctrico comienza a despegar. En el acumulado de enero a agosto, el número de motocicletas de cero emisiones vendidas en la ciudad de Madrid ha pasado de 257 en 2017 a 991 en 2018. Un espectacular crecimiento del 285,6%. Es cierto que el mercado ha crecido en el conjunto de España, aunque en menor medida: un 129%. De hecho, de las 2.838 motos eléctricas vendidas en todo el país, 991 fueron adquiridas en nuestra ciudad. En resumen: casi una de cada tres motocicletas eléctricas se vende en la capital.

Los ciclomotores ecológicos también aumentan casi un 60% –de 232 unidades a 366–, aunque por debajo de la media nacional, que rozan una subida del 70%.

Anesdor señala asimismo la subida en general del sector de las dos ruedas, con aumentos del 26,3% en la venta de motocicletas y del 20,3% en el caso de los ciclomotores. «Cada vez más madrileños encuentran en la moto una solución de movilidad a los grandes retos que presenta la ciudad», afirma José María Riaño, secretario general de la asociación. «Reduce los tiempos de desplazamiento entre un 50 y un 70%, es fácil de aparcar y genera menos emisiones que otros vehículos motorizados. Ello ha motivado que la demanda de vehículos de dos ruedas en Madrid aumente tanto entre particulares como a través del canal de alquiler y de empresas, lo que se ha traducido en un crecimiento durante los ocho primeros meses del año del 29%, una cifra superior a la registrada en el conjunto de nuestro país (11%)», añade.

La motivación de adquirir una moto para no perder tiempo en el estacionamiento es otro de los reclamos. Si bien el Ayuntamiento asegura que no se han perdido plazas, ya que las eliminadas se compensaron con otras nuevas, el PP aseguraba este año que nuestra ciudad contaba con 12.000 menos. En todo caso, muchos vecinos tienen la percepción de que cada vez cuesta más aparcar. El colectivo Chamberí Se Defiende cifraba en 500 las pérdidas en su distrito debido a acciones como la instalación de contenedores y urinarios públicos. En lo que se refiere a las plazas específicas para motos, el Consistorio anunció que en Madrid Central se verán incrementadas en 61 nuevas ubicaciones.

Aún así, los usuarios deberán vigilar a partir de ahora dónde aparcan sus vehículos. El colectivo de Chamberí recuerda que ya se están produciendo los primeros avisos por parte de los agentes de movilidad a todos aquellos que aparquen en la acera. Y es que se acabó la «barra libre» en este aspecto: la nueva ordenanza de movilidad prevé multas por estacionar en este espacio siempre que no se dejen tres metros de ancho libre. Una normativa que afectará también a los usuarios de ciclomotores, bicicletas, patinetes eléctricos y «segways».

Son muchas las ventajas de utilizar un vehículo de dos ruedas en una ciudad como Madrid. Entre otros, el ahorro de combustible, que en el caso de un turismo se duplica o triplica. Sin embargo, desde la Asociación de Autoescuelas advierten del peligro que supone pasar de conducir un turismo a una motocicleta ligera, algo que permite automáticamente la obtención del permiso B, sin contar con una preparación adecuada. Como apunta Ricardo Cano, «hemos pedido a la DGT que exija cursos formativos a los conductores de motocicletas de 125 cc antes de que puedan llevarlas en la vía pública», pues están percibiendo un aumento de accidentes de ciclomotores. En su opinión, las condiciones climatóligicas adversas y la falta de una equipación adecuada son sólo dos de los peligros que acechan a los conductores de dos ruedas sin experiencia.