Un 26% de las familias españolas se salta comidas para ahorrar

Pese a que los datos reflejan que la situación actual es peor que en 2016, España se ha situado como el país con menos familias con problemas económicos para alimentarse de los países de Europa analizados, que son España, Francia, Italia, Alemania, Reino Unido, Irlanda y Bélgica. Mientras que en nuestro país el 17,7% de las familias reconocen problemas económicos para alimentarse, en Alemania el porcentaje alcanza el 21,3%, en Francia el 25,5% y Reino Unido, con el 29,3% alcanza el nivel más alto de las familias con dificultades.

Datos preocupantes

El informe de Kellogg revela que dos de cada tres españoles han visto comprometida su situación financiera en los últimos meses, lo que los ha llevado a recortar gastos en bienes y servicios esenciales. Además, el porcentaje de españoles preocupados por el dinero del que disponen para alimentarse ha crecido desde el 19% en 2016 hasta casi el 33% en 2023, una preocupación especialmente notable en las familias con rentas inferiores a 15.000 euros.

La situación de las familias con rentas bajas es preocupante. El 41% de los hogares cuyos ingresos no alcanzan los 15.000€ anuales se salta comidas para ahorrar dinero.

Factores como la crisis económica generada por la pandemia y el alza de los precios por la situación geopolítica global y el cambio climático, han tenido un fuerte impacto en el crecimiento del índice de pobreza alimentaria.

Hambre y rendimiento escolar

Uno de los aspectos que recoge el informe es la opinión de los profesores sobre el impacto del hambre en el rendimiento escolar. El testimonio de los docentes encuestados es preocupante: el 73% de los profesores entrevistados en los siete países analizados afirma que el problema de los niños que llegan hambrientos a la escuela se ha hecho más común en los últimos años. De hecho, en España, dos de cada tres profesores entrevistados creen que los padres tienen problemas con el presupuesto para alimentos.

Del mismo modo, los profesores en nuestro país perciben que el hambre perjudica a sus alumnos en el rendimiento académico, puesto que acudir al colegio con una mala alimentación se traduce en cansancio, dificultades para la concentración, bajo estado de ánimo o comportamientos disruptivos.

La colaboración de Kellogg’s

La visión de Kellogg es un mundo bueno y justo donde las personas no solo estén bien alimentadas, sino también satisfechas. La compañía ha impulsado la realización de este estudio porque le permite analizar la situación y, con base en evidencias, responder a las deficiencias alimentarias entre los escolares poniendo en marcha programas sociales como Todos a Desayunar, que lleva en funcionamiento desde 2011. Amparo Lobato, responsable de asuntos corporativos de Kellogg para España y Portugal, sostiene que los datos del informe “avalan la necesidad, conveniencia y beneficios de ofrecer desayunos en los colegios, como hace nuestro programa, con el que han desayunado unos 10.000 niños y niñas de entre 4 y 12 años, en 24 colegios de 12 ciudades españolas. Hemos superado ya el millón de desayunos completos servidos y hemos colaborado de este modo a mejorar las condiciones de vida de los menores en el ámbito escolar, familiar, social y personal”.

En línea con este compromiso, Kellogg forma parte de la ‘Alianza País Pobreza Infantil Cero’, promovida por el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, cuyo objetivo es romper el círculo de la pobreza infantil en nuestro país. Esta es una tarea que involucra a administraciones públicas, empresas, fundaciones, tercer sector y sociedad civil.

El porcentaje de españoles preocupados por el dinero del que disponen para alimentarse ha crecido del 19% en 2016 a casi el 33% en 2023.

En la misma línea, Kellogg tiene el compromiso de ayudar a que las familias adquieran hábitos de vida saludable. Para ello, en 2021 pusieron en marcha los Campus Social Basket Kellogg’s, como complemento a Todos a Desayunar, extendiendo los beneficios de la alimentación a menores en riesgo de exclusión social mientras disfrutan del deporte. Gracias a esta iniciativa, más de 600 menores de entre 6 y 14 años disfrutan durante el verano y periodo navideño del baloncesto, mientras adquieren sus valores y reciben 4 de las 5 comidas diarias recomendadas.

Además, Kellogg contribuye al talento y la formación de los jóvenes, ayudándoles a realizar estudios de E.S.O., FP, Bachillerato y Universidad mediante las Becas de Estudios Kellogg’s; a las que optan los beneficiarios del programa Todos a Desayunar con expedientes académicos extraordinarios que tienen serias dificultades económicas para poder continuar su preparación para un futuro mejor.

Por otro lado, desde hace décadas, la compañía colabora con los Bancos de Alimentos de España, no solo donando sus excedentes de producción, sino también en ocasiones produciendo alimentos para donar. Durante el último año, Kellogg ha donado más de 800.000 raciones de alimentos en España, además de hacer aportaciones económicas a la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL) para ayudar a hacer frente a los costes adicionales que requiere la distribución de alimentos a las personas más necesitadas.

Contra el hambre infantil

El Informe Kellogg’s sobre pobreza alimentaria en España recoge información sobre las causas del hambre infantil para, a través de la colaboración con Bancos de Alimentos y programas sociales de desayunos en colegios como Todos a Desayunar, paliar los efectos de la situación económica en la alimentación y rendimiento escolar de niños y niñas.

En este sentido, Gabriela Jorquera, subdirectora del Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, declaró en la presentación del informe que “gracias al escudo social y a las medidas puestas en marcha por el gobierno de España, estamos paliando el incremento de la pobreza”.

Gracias al programa “Todos a Desayunar” de Kellogg han desayunado unos 10.000 niños y niñas de entre 4 y 12 años, en 24 colegios de 12 ciudades españolas.

Del mismo modo, Rafael Herráiz, director general de Cooperación Internacional ONG, sostiene que “las organizaciones del tercer sector juegan un papel fundamental a la hora de facilitar la puesta en marcha de iniciativas que involucren a administraciones públicas, empresas, fundaciones y sociedad civil con el objetivo común de reducir la pobreza en nuestro país”.