«La Mezquita» de Cadalso será BIC

Un nuevo yacimiento arqueológico se incorpora a la lista BIC. El Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) del pasado martes, anunciaba la incoación del expediente de declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Zona de Interés Arqueológico del yacimiento de «La Mezquita» del municipio madrileño de Cadalso de los Vidrios. La Comunidad toma en consideración así la importancia de este conjunto arqueológico como vestigio material de la importancia histórica de Cadalso de los Vidrios, la diversidad tipológica y singular de sus enterramientos y su valor como lugar de divulgación por su interés histórico, científico, artístico, arqueológico y educativo.

Tanto es así, que en esta población fue testigo del acuerdo entre Enrique IV de Castilla y su hermanastra, Isabel I, quien será conocida posteriormente con el sobrenombre de «La Católica», por el que se ratificaba a Enrique IV como rey legítimo y a Isabel como heredera al trono de Castilla. De hecho, de esta época datan la mayor parte de los enterramientos de familias pudientes que se han encontrado. Y es que, este yacimiento de «La Mezquita» comprende dos elementos principales, la iglesia y la necrópolis. Por lo que respecta al templo, se conservan restos de una iglesia románico-mudejar con distintas fases de construcción desde inicios del siglo XII-XII hasta el siglo XVII, época del abandono del templo, al construirse la iglesia parroquial del pueblo. Era de planta rectangular, con una única nave, con cubierta a dos aguas.

De la cabecera de la iglesia primitiva se conservan restos de pilastras y de cimentaciones de grandes piezas de granito. Igualmente se han documentado vestigios de los elementos añadidos con posterioridad, como el presbítero y el ábside circular, que corresponde a una ampliación realizada entre los siglos XV y XVI, junto a la que se adosaron la torre, la sacristía y el albañal o sistema de evacuación de aguas. Además, entre los restos se han encontrado restos de materiales diversos, como ladrillo mudéjar, encofrados de cal y canto o sillería labrada, que se corresponden a las distintas fases constructivas. Entre estos restos constructivos cabe destacar los pertenecientes a un arco mudéjar de ladrillo con tres arquivoltas perteneciente a la época fundacional del templo, que fue demolido en 1988 por el propietario de los terrenos, en una actuación lamentable que dio lugar a la expropiación por parte de la Comunidad de Madrid y posterior cesión al municipio de cadalso de los Vidrios. Actualmente se conservan tan sólo los arranques de sus muros a distintas alturas. El nombre del yacimiento «La Mezquita», es debido a la creencia popular por la que se pensaba que en el lugar existía una mezquita, pero este punto ha sido descartado por los investigadores al no hallar restos de la misma.

El segundo elemento protegido es la necrópolis o como se conoce popularmente en la localidad el camposanto viejo, asociado a la presencia del templo y que se extiende tanto por el interior como por el exterior.

Igualmente se han podido identificar tres fases de enterramientos y se han documentado más de cien tumbas correspondientes a los distintos momentos de uso del cementerio. Así, con una primera fase fundacional, se corresponden enterramientos excavados en el nivel de roca con forma antropomórfica, bien de cabecera recta o circular y otros con forma de bañera, destinados principalmente a enterramientos infantiles. Una segunda fase se correspondería con enterramientos en fosa muy simples, con individuos sepultados con sudario en ataúdes de madera y cubiertos con tierra.

Por último, una tercera fase de enterramientos corresponde a la fase de ampliación del templo entre los siglos XV y XVI, que coincide con la época de esplendor de Cadalso de los Vidrios, como se refleja en el gran número de losas graníticas con inscripciones que indican la condición noble de algunas de la familias enterradas.

Destaca de esta última fase la gran diversidad de enterramientos, como los de fosa con cubierta granítica, los de lajas y las tumbas realizadas en adobe.

Durante los trabajos de excavación arqueológica de distintas campañas se han extraído elementos de cultura material que han aportado valiosa documentación. Destacan las lápidas escritas con caracteres en letra gótica y humanística, así como fragmentos cerámicos.

También se han documentado monedas de distintas épocas, como ocho maravedíes de cobre de Fernando VII, dos vellones pobres, óbolos y cuartos de vellón del siglo XII, monedas de los reyes Alfonso X y Enrique IV. Se han hallado asimismo estelas funerarias de granito, fragmentos de loza vidriada y una serie de elementos comunes, platos, objetos votivos, clavos, alfileres, restos de tejidos o unas pinzas, unas lleves y una hebilla de cobre, entre otros muchos.