Post 4-M

“Inteligencia colectiva”, el secreto del «sorpasso» de Más Madrid

El partido atribuye gran parte de su éxito a los talleres creativos impulsados por una militancia autoorganizada y el apoyo de organizaciones expertas en adaptación al cambio

La lona gigante que desplegó Más Madrid en Gran Vía en las elecciones del 4-M
La lona gigante que desplegó Más Madrid en Gran Vía en las elecciones del 4-MBRUNO THEVENIN (MÁS MADRID)BRUNO THEVENIN (MÁS MADRID)

Ahora que los partidos entran en la etapa de análisis y autocrítica sobre los resultados electorales del 4-M, son muchos los que se preguntan por el secreto del éxito de la campaña de Más Madrid que ha llevado a la formación errejonista con pocos años de vida política a un «sorpasso» histórico al PSOE hasta convertirse en la principal fuerza de la oposición en Madrid con una candidata desconocida. Y todo ello con el presupuesto de campaña más bajo de todos los partidos de la izquierda: 600.000 euros, frente al 1.800.000 de Unidas Podemos y los más de dos millones gastados por el PSOE.

Para empezar, desde el propio partido valoran que el liderazgo de Mónica García y su figura como médico, profesional, madre y feminista ha funcionado. Consideran que su perfil era muy apropiado en el momento en el que nos encontrábamos en plena pandemia. Pero la clave no está solo en tener un buen candidato. Por eso uno de los puntos fuertes y más valorados en esta campaña ha sido el uso de la «inteligencia colectiva» e incluso el apoyo de organizaciones externas especializadas en cambio, innovación y transformación. Es el caso de «Kubadili», experta en acompañar a ONG, empresas sociales y gobiernos «para que puedan anticiparse y adaptarse al cambio» que hasta ahora ha trabajado, sobre todo en «dar respuesta a los complejos desafíos de América Latina», tal y como expone en su página web su misión principal. Se define como una empresa que «construye soluciones ágiles.

No es la única que ha colaborado. «Thinking with you» es otra de las empresas que ha trabajado con la formación y que se dedica a «acompañar a personas, equipos y organizaciones en la comprensión y adaptación al contexto de cambio en el que vivimos actualmente».

Más Madrid, a diferencia de otros partidos, «tiene una dirección de abajo a arriba, hay una militancia viva e ilusionada y cuando llega una campaña no necesitamos contratar empresas, se da pie a la autoorganización de las asambleas distritales de Madrid, en los distintos municipios y por sectores (jóvenes, mayores, Lgtbi...)», cuentan desde el partido fundado por Íñigo Errejón.

La formación es consciente de que una gran parte de su militancia participa muy activamente en la vida civil madrileña: está integrada en organizaciones, Ampas de colegios... que rápidamente se moviliza con iniciativas por su cuenta cuando de lo que se trata es de hacer campaña.

«La asamblea de militantes de Más Madrid decide sus actividades de campaña y hemos dado mucha rienda suelta a la imaginación de la gente. Esto no es un ordeno y mando», aseguran fuentes de la formación.

Cuando se dio el pistoletazo de salida para una nueva campaña, la militancia se puso manos a la obra con talleres creativos desarrollados de manera virtual para diseñar acciones. Se empezó recogiendo ideas para la campaña con un sencillo formulario. «Se buscaban acciones creativas, artísticas, sorprendentes, imaginativas, reivindicativas, divertidas que generan impacto en la gente y ganas de votar por Más Madrid», cuenta Daniel García, coordinador de los talleres creativos. Las premisas que se pusieron eran las siguientes: que reivindicaran propuestas del programa de Más Madrid; que no requirieran necesariamente la presencia de la candidata; que no generasen residuos ni dañasen el medio ambiente e incluso se pudiese utilizar material reciclado, de muy bajo, ninguno o muy justificado coste; además de enmarcadas dentro de la pandemia, cambio climático o crisis social. Y todo esto se tenía que hacer con «equipos autoorganizados».

García cuenta que en los talleres participaron más de cien personas que, a través de metodologías participativas, se constituyeron en grupos de trabajo que fueron supervisados por el comité de campaña.

De estos talleres creativos salieron iniciativas como un maratón en el que cientos de militantes se fueron pasando un testigo con un código QR que llevaba impreso el programa electoral de Más Madrid que acabó en manos de la candidata el 1 de mayo; se hicieron carteles ecológicos; recorridos por todo Madrid en bicicleta, sesiones de tai-chi y bailes de salón para mayores en espacios abiertos; desayunos saludables en las carpas informativas con pizarras en las que los ciudadanos pudieran escribir sus sugerencias o iniciativas... «Es una nueva forma de entender la política aprovechando al máximo la creatividad e inteligencia colectiva con el uso de herramientas vanguardistas de organización», concluye García.

Si hay otro factor que ha funcionado a la formación errejonista es su discurso regional fuera incluso de los focos. «Hay otros partidos que están acostumbrados a ver a sus líderes en la televisión, pero nosotros somos un partido regional y hemos estado con muchos sectores, vecinos y sociedad civil que han podido hablar con nuestros dirigentes en persona. Con eso creas una organización más engrasada y una organización más activa», cuentan en el partido.