Duros ataques

La conexión entre Ayuso y Afganistán, según Podemos: “La presidenta mira hacia otro lado”

La formación morada se lanzó al ataque contra la presidenta madrileña horas después de que desde Sol se pusieran a disposición de Moncloa para ayudar en lo que se “nos solicite lealmente”

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante la misa solemne por la festividad de la Virgen de la Paloma el pasado domingo.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante la misa solemne por la festividad de la Virgen de la Paloma el pasado domingo.Ricardo RubioEuropa Press

Afganistán e Isabel Díaz Ayuso. Podemos ha visto una conexión entre la tragedia de este pueblo derivada de la victoria de los talibanes y la gestión de la presidenta madrileña. ¿Cómo dejar pasar la oportunidad? La formación morada, imaginamos, analizó concienzudamente la situación, consultó con sus expertos en política internacional y se lanzó a por ello: «La Comunidad de Madrid. Debe ser una ciudad de acogida de refugiados y refugiadas de Afganistán que huyen del terror talibán. Es una necesidad humanitaria y Díaz Ayuso no puede seguir mirando para otro lado».

Hacer oposición a un gobierno a toda costa, caiga quien caiga y en cualquier materia que se ponga por delante es una opción política. Quizá no sea la más edificante. Ni siquiera la más rentable en términos electorales. Pero cada partido y cada líder elige su estrategia. Son los ciudadanos, finalmente, los que ponen a cada uno en su sitio cuando les llega el momento. Es una opción más, por tanto. La vía de la confrontación permanente, el ataque por tierra, mar y aire. El tuit facilón que te genere el aplauso de los correligionarios. La frase supuestamente ingeniosa y el chascarrillo cocinado como la comida rápida. Existe el peligro, no obstante, de caer en la caricatura. O en el bochorno directamente cuando lo que se utiliza para atacar al oponente es el drama afgano y el objetivo de tus dardos es un gobierno autonómico como el madrileño sin competencias para poder auxiliar a las víctimas del integrismo religioso.

Hay otro problema. Cuando uno se entrega a la oposición del ataque permanente debe, al menos, intentar ser rápido. Madrugar un poco, quiero decir. Podemos lanzó su mensaje a las tres de la tarde. Horas antes, el Gobierno de Ayuso había mostrado su disposición a colaborar en lo que el Ejecutivo de Sánchez «nos solicite» de una manera «leal». Un día antes del llamamiento morado, el Ayuntamiento de la capital, a través de la vicealcaldesa Villacís, ya había ofrecido 25 plazas de acogida para mujeres afganas.

Desde Moncloa, de momento, no ha llegado requerimiento alguno ni a las comunidades ni a los ayuntamientos. El presidente Pedro Sánchez, de hecho, no ha interrumpido sus vacaciones como sí han hecho algunos de los principales líderes europeos. Y la competencia de acogida de refugiados y de perseguidos por regímenes que atacan a los derechos humanos es exclusiva del Gobierno de la Nación. Del que forma parte Podemos, hay que recordar. Quizá Podemos tiene algo que decir sobre ello. A las tres de la tarde lo sabremos.