
Sucesos
Detienen en Toledo al autor del atropello mortal a su amigo en Parla
El entorno de Daniel, que fallecía a los 34 años, espera que la policía pueda dar con todos los implicados

El pasado 3 de mayo, una discusión entre dos amigos del mismo grupo, en la calle Zurbarán de Parla, acababa en un atropello mortal. Ambos habían tenido, días antes, una disputa, por la que acabaron llegando a las manos, lo que le costó a Daniel, el fallecido, una denuncia por agresiones. Precisamente, esta denuncia habría sido el detonante de la discusión del viernes 3 de mayo a las puertas de un garaje, según afirman fuentes de su entorno familiar a LA RAZÓN, y confirmado por fuentes policiales. Sin embargo, aún se desconocen los motivos que causaron la discusión inicial, así como el detonante de su enfrentamiento, lo que también habría dividido al grupo.
Según los testimonios de los testigos, en el vehículo que ejecutó el atropello, viajaban tres personas más, que aún no habrían sido identificadas. Sin embargo, el presunto autor del atropello mortal fue detenido solo dos días después del suceso, en un pueblo de Toledo. La familia confirmaba la «intencionalidad del atropello», basándose en el testimonio de varios testigos: «el coche le pasó hasta tres veces por encima».
Cuando las asistencias sanitarias llegaron, Daniel sangraba abundantemente. Fue trasladado de emergencia al Hospital 12 de Octubre, donde fallecía, a los 34 años, a comienzos de esta semana, tras dos días en coma. En declaraciones a Antena 3, la madre de Daniel, transmitía su desconsuelo y su voluntad de que «se haga justicia»: «Quiero que se haga justicia y no voy a parar hasta que cojan a los cuatro que iban en el coche. A mi hijo lo han asesinado a sangre fría».
Gracias a un amigo, que estuvo con Dani en todo momento, se pudo identificar al presunto autor de los hechos, así como el coche en el que se perpetró, lo que ayudó a los agentes del Grupo VI de Homicidios de Policía Nacional a su localización. Además, este testigo asegura conocer también a los otros tres ocupantes del vehículo, afirmando que también habían sido amigos de Daniel.
Algunos miembros del mismo grupo no han querido prestar su testimonio, al menos hasta que se resuelva todo y aparezcan todos los posibles implicados. Aunque en el barrio muchos conocían la situación de tensión que se vivía entre los protagonistas del suceso, nadie imaginaba un desenlace así, por lo que ahora se extrema la prudencia entre todos los conocidos.
Desde el entorno familiar garantizan colaborar con la policía, que aún no ha finalizado sus investigaciones sobre el caso y sigue recabando cualquier información sobre el entorno de Daniel y el detenido. Pero, a pesar de la gran eficacia de la Policía en localizar y detener al presunto autor, la familia asegura que no descansará hasta dar «con todo aquel que haya tenido algún tipo de implicación en el asesinato de Daniel».
Desde ahora el curso de las investigaciones se centra en conocer las causas que acabaron dividiendo al grupo o si se trató de un ajuste de cuentas. Daniel, que no tenía hijos, era muy activo en redes sociales como TikTok, donde subía contenido casi a diario y acumulaba cientos de seguidores. Las redes sociales cada vez son un elemento más indispensable en este tipo de investigaciones, ya que pueden arrojar luz, sobre el entorno y los contactos de los implicados, así como desvelar posibles episodios de amenazas o agresiones verbales.
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