Las cinco bebidas a evitar para las personas con colesterol elevado

La salud de las personas se encuentra estrechamente relacionada a la alimentación. Todo aquello que ingerimos a lo largo de nuestras vidas repercute directamente a nuestro organismo dañándolo o beneficiando, en ocasiones, mucho más de lo que podemos pensar.

Una dieta equilibrada resulta, así, fundamental para que el funcionamiento del cuerpo humano sea lo más correcto posible. Además, gracias a este cuidado podemos llegar a evitar muchas de las patologías comunes que desde hace unas décadas afectan a una parte sustancial de la población.

Otras enfermedades comunes como el resfriado, por ejemplo, pueden ser más llevaderas si se cuenta con un buen estado físico. Así, el organismo es capaz de combatir de una forma más efectiva los agentes externos que penetran el cuerpo tratando de dañarlo con una respuesta inmediata.

Pero la alimentación no es el único punto a tener en cuenta si deseamos llevar una vida saludable. Así, aunque resulte fundamental controlar aquello que comemos también deberemos realizar actividad física de forma regular y vigilar nuestro descanso, algo que en muchas ocasiones no se tiene en cuenta.

Según los expertos, estas tres variables son necesarias si deseamos evitar la mayoría de problemas de salud en la actualidad. Incluso, aquellas enfermedades que son menos controlables pueden ser evitadas o combatidas de mejor forma si cumplimos esos tres pilares saludables.

En ese sentido, el colesterol es uno de los mayores problemas en la actualidad. Esta sustancia que se encuentra en las membranas celulares, las lipoproteínas, las hormonas esteroideas y los ácidos biliares provoca una acumulación de grasa que, incluso, llega a ser muy peligrosa para el organismo. Además, sus efectos puenden influir en la aparición de enfermedades cardiovasculares y grasa en las arterias hasta el punto de llegar a ser mortales.

Llegados a este punto, cabe destacar que unos niveles elevados de colesterol, concretamente del conocido como malo, suelen ser la causa de muchos de los problemas actuales. Pese a que el límite suele establecerse en los 200 mg/dl, según la Fundación Española del Corazón (FEC), existen contextos distintos que deben ser también controlados por un especialista.

Niveles elevados de colesterol

El término médico empleado por los especialistas para los niveles altos de colesterol es la hipercolesterolemia. Así, pese a que puede ser muy peligroso no suele dar muchos síntomas y son los propios cardiólogos los que recomiendan chequeos periódicos a partir de los 40 años para comprobar los niveles.

Además, una vez identificada se toman medidas para que los niveles no sigan incrementando y poder así evitar problemas futuros. Por ello, se suelen realizar una serie de modificaciones en los hábitos de los pacientes para mejorar su salud entre las que destacan evitar algunos alimentos que pueden ser muy peligrosos.

Pese a que suelen eliminarse algunos por completo todo depende del contexto o del consumo que la persona haga. Aun así, también se recomienda incrementar la actividad física para mejorar la salud y así evitar muchos de los problemas actuales como el sedentarismo.

En el campo de las bebidas es donde normalmente los médicos hacen mayores modificaciones. Muchos de estos productos, además, se encuentran muy presentes en la sociedad por lo que cuesta más encontrar de donde proviene el problema o eliminarlo.

El primer producto que los especialistas suelen eliminar por sus peligros es el alcohol. Un consumo poco o moderado de este puede conllevar un aumento del colesterol y los triglicéridos que afecten en exceso al organismo por lo que resulta fundamental desplazarlo todo lo posible.

El café es otra de las bebidas que se debe vigilar. Pese a que todavía no existe un consenso científico absoluto este puede elevar el colesterol por su compuesto llamado cafestol que, además, en ocasiones suele ir acompañado de azúcar, algo a evitar si padecemos niveles altos.

La leche entera y los batidos azucarados son otras dos bebidas lácteas que deberemos vigilar. En el primer caso sus compuestos suelen ser beneficiosos para el organismo aunque su presencia de grasa puede ser un peligro en los pacientes con hipercolesterolemia. En el caso de los batidos, por otra parte, la gran presencia de azúcares añadidos suelen ser una de las causas del aumento de colesterol.

Por último, las bebidas azucaradas también deberán vigilarse en los casos de hipercolesterolemia. Su gran presencia de los edulcorantes junto a otros compuestos pueden ser un problema para el organismo.