Opinión

Los beneficios de las vacunas de otoño

Un paciente recibe una dosis de la vacuna antigripal cuando empezó a administrase a la población mayor de 60 años de forma conjunta a la cuarta dosis frente al covid-19 en el Centro de Salud Alameda de Osuna, en Madrid
Un paciente recibe una dosis de la vacuna antigripal cuando empezó a administrase a la población mayor de 60 años de forma conjunta a la cuarta dosis frente al covid-19 en el Centro de Salud Alameda de Osuna, en MadridSergio PérezAgencia EFE

Las infecciones de vías respiratorias altas (nariz, garganta, etc.) son muy frecuentes al llegar el otoño. Aunque la mayoría se resuelven en unos pocos días, un 5-25% pueden complicarse con neumonías, esto es, una infección pulmonar y requerir hospitalización. Los virus de la gripe, los rinovirus, el virus respiratorio sincitial y los coronavirus, incluido el SARS-CoV-2 (causante de la covid) son los patógenos más frecuentes.

Las personas de edad avanzada, las que tienen enfermedades del pulmón (p.e., por el tabaco o asma) y las que padecen algún déficit inmunológico, son las más proclives a desarrollar complicaciones del resfriado. Las infecciones pulmonares bacterianas son las más frecuentes. Requieren tratamiento antibiótico de forma precoz.

Las vacunas representan una alternativa a los antivirales para hacer frente a las infecciones víricas. Se han demostrado muy eficaces para reducir la gravedad de la gripe y de la covid. Las autoridades sanitarias han recomendado la vacunación doble (de gripe y coronavirus) a todas las personas con más de 60 años. También a las más jóvenes con enfermedades crónicas, mujeres embarazadas y al personal sanitario.

Se trata de dos inyecciones intramusculares, una en cada brazo, para reducir el riesgo de formas graves. La vacuna de la gripe es tetravalente, esto es, frente a dos variantes del virus influenza A y dos de influenza B. La vacuna de covid está actualizada e incorpora respuesta frente a dos variantes omicron (BA.4 y BA.5).

Un estudio israelí demostró en abril de 2022 que la cuarta dosis frente a la covid, esto es, la segunda dosis de recuerdo, reducía 3 veces el riesgo de hospitalización y fallecimiento en personas con más de 60 años. Dado que la inmunidad se pierde progresivamente, las dosis de recuerdo se recomiendan tras 4 meses de la última vacuna frente a covid. Por el momento solo están autorizadas las vacunas de ARNm, esto es, las de Moderna y Pfizer.

Además de las vacunas de la gripe y contra el SARS, las campañas de vacunación deben recordar el beneficio de las vacunas frente a otros patógenos respiratorios. Es el caso de la vacuna frente al neumococo, que es muy eficaz para reducir las neumonías por esta bacteria.

Se recomienda a los mismos grupos de población que reciben la vacunación antigripal y de la covid.

Vicente Soriano es médico especialista en Enfermedades Infecciosas y profesor titular de la UNIR