Religión
España conquistará la JMJ de Lisboa con más de 75.000 jóvenes
La capital lusa acogerá este encuentro con el Papa que arrancará el 1 de agosto
Hoy por hoy, España cuenta con la delegación más numerosa de peregrinos que asistirán este verano a la Jornada Mundial de la Juventud, el encuentro global convocado por la Iglesia católica que se celebrará del 1 al 6 de agosto y que presidirá Francisco. Así lo confirmó ayer el sacerdote Raúl Tinajero, director de la Subcomisión de la Subcomisión Episcopal para la Juventud y la Infancia. «Es el país del mundo con más inscritos», sentenció.
Durante un encuentro con periodistas, Tinajero aventuró, sin embargo, que se podrían superar los 100.000 participantes de nuestro país, en medio de una convocatoria donde posiblemente se llegue al millón. «Evidentemente, muestra el interés, la importancia, la relevancia que tiene la presencia del Papa, y la llamada que tiene para los jóvenes, pero también muestra un trabajo que se lleva haciendo años en las parroquias y los pequeños grupos», reflexionó el sacerdote. En esta misma línea se manifestó Arturo Ros, obispo auxiliar de Valencia y presidente y presidente de la Subcomisión Episcopal para la Juventud y la Infancia. «Vamos a batir récords de presencia porque nuestros jóvenes son muy grandes», subrayó.
Los jóvenes estarán alojados en más de 1.000 familias y unos 150 espacios comunes, como colegios y pabellones deportivos. Además, hasta la capital portuguesa se desplazarán un total de 71 obispos españoles, que tendrán en manos dinamizar algunas de las 25 catequesis de habla hispana que se celebrarán cada día del encuentro mundial.
Como aperitivo a la llegada de Francisco a Portugal, que tendrá lugar el 2 de agosto, todos los grupos de españoles se concentrarán el lunes 31 de julio en Estoril, llegados de 67 diócesis de España, de 32 congregaciones religiosas y de 11 movimientos de ámbito nacional e internacional. Esta pequeña cumbre contará con un festival de música, testimonios de algunos participantes y una eucaristía presidida por el presidente del Episcopado y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella. Como colofón de esta fiesta, se desplazará hasta allí Nacho Cano, que interpretará dos canciones de «Malinche», el musical con el que está triunfando en la cartelera madrileña, junto a una treintena de los artistas del espectáculo.
«La JMJ es un acontecimiento de fe, queremos celebrar nuestra fe juntos», expuso Ros. «Queremos contar la alegría de saber que Cristo vive. Vamos a Lisboa fundamentalmente para celebrar nuestra fe en Jesús y expresarla con nuestro modo de ser, con nuestra alegría, con la fraternidad que nos anima a caminar juntos», compartió el obispo. Convencido de que «quiere ser y es una experiencia de comunión universal», valoró la presencia del Papa: «Queremos escuchar la palabra de Francisco, ver su sonrisa…».
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