La Guardia Civil investiga sendos accidentes de circulación con resultado de muerte

La Guardia Civil investiga sendos accidentes con resultado de muerte ocurridos en las provincias de Huesca y Cuenca. En la noche de ayer, se produjo uno de ellos en el kilómetro 331,500 de la autovía A-23, calzada sentido Francia y término municipal de Gurrea de Gállego, Huesca, consistente en choque por alcance entre dos furgonetas y posterior atropello de una de ellas a tres peatones. Como resultado del mismo, ha fallecido una persona y tres personas heridas leves.

La persona fallecida es un varón 31 años, vecino de Huesca. Los heridos leves son varones de 21, 20 y 32 años, los dos primeros vecinos de Huesca y el último, vecino de Linares (Jaen). El cadáver ha sido trasladado al instituto de medicina legal en Zaragoza..

Por otra parte, la Guardia Civil de Cuenca investiga a una mujer de 38 años de edad, como presunta autora de un delito de homicidio por imprudencia. Los hechos están relacionados con el siniestro vial ocurrido en el kilómetro 26,800 de la vía CM-211, término municipal de Puebla del Salvador, cuando el turismo que conducía la investigada, ocupado por ella misma y dos menores de edad en los asientos traseros, alcanzó a un tractor, haciéndolo volcar sobre un campo de labor. Resultó fallecido su conductor y único ocupante; mientras que los del turismo resultaron heridos leves. Según las investigaciones llevadas a cabo por el Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de Cuenca, la causa principal del siniestro vial pudiera tener su origen en una infracción al Reglamento General de Circulación cometida por la conductora del turismo, al no adecuar la velocidad a las condiciones de la vía por tener el sol de frente, lo cual dificultaba la visión.

Por todo ello, la conductora ha sido investigada como presunta autora de un supuesto delito de homicidio por imprudencia grave; siendo puesta a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 2 de los de Motilla del Palancar. Según los hechos acaecidos, la conductora responsable podría enfrentarse a penas de prisión que van desde uno a cuatro años y la privación del derecho de conducir vehículos a motor y ciclomotores de uno a seis años.