Juego del calamar

El propio Seong Gi-hun habla del final de 'El juego del calamar' y de su notable cambio físico

Lee Jung-jae, que interpreta a Seong Gi-hun en la serie El juego del calamar, da su particular visión sobre su destino en el capítulo final

El propio Seong Gi-hun habla del final de 'El juego del calamar' y de su notable cambio físico
10 kilos menos para ilustrar su deterioro y agotamiento mentalPropia

Se estrenó hace apenas una semana pero, al parecer, medio internet ya ha vistoentera de El juego del calamar, cuya tercera temporada, que podrá ser mejor o peor que la anterior, aunque ninguna supera a la primera, no ha dejado indiferente a nadie.

Buena culpa de ello la tiene su final, del cual ya os hemos hablado en un par de ocasiones, ya sea para contaros, y ojo que vienen spoilers, acerca de su hollywoodiense cameo durante sus últimos segundos, o para sorprenderos, y a nosotros mismos, con el hecho de que su creador y guionista estuviera a punto de darle un desenlace muy diferente a su máximo protagonista, un Seong Gi-hun interpretado por Lee Jung-jae.

Satisfactorio y abierto

Precisamente el actor surcoreano ha concedido una entrevista a Variety en la que desvela varios detalles de estos últimos episodios, como que recibió los guiones completos de las temporadas 2 y 3 el mismo día, y que el final de su personaje le sorprendió tanto como al público. "Fue algo que no esperaba ver. Hablé mucho sobre ese desenlace con el director Hwang. Me dijo que había considerado otras posibilidades, pero que este era, en su opinión, el modo correcto de cerrar la historia", explica Lee.

El actor insiste en que el sacrificio de Gi-hun no debe verse solo como un acto de renuncia, sino como una especie de símbolo de esperanza para la humanidad. La escena final, que corta sus últimas palabras de forma deliberada, también fue objeto de muchas conversaciones. "Pensamos que sería mejor dejar que el público terminara esa frase en su mente, con sus propias emociones", dice.

El momento más complicado de rodar para Lee fue, precisamente, ese desenlace. Y no solo por la carga dramática, sino también por el deterioro físico que su personaje muestra: "Estuve siguiendo una dieta muy estricta durante 14 meses. Perdí unos 10 kilos respecto a mi peso habitual. Quería que el público viera que Gi-hun estaba completamente agotado solo con mirarlo", confiesa.

Difícil elección

Sobre el futuro de su hija en la serie, Lee admite que como espectador le gustaría verla tomar las riendas y destruir el sistema de los juegos. Pero como padre ficticio, desea algo muy distinto: "Ojalá nunca se entere de nada. Solo quiero que tenga una vida feliz y estable con su madre y su padrastro", concluye.