Ciencia y Tecnología

Bosch prepara el camino hacia pantallas 3D en vehículos

Una tecnología tridimensional pasiva facilitará la visualización de alertas sobre incidencias en la ruta y más calidad en las imágenes de la cámara trasera.

Las pantallas con tecnología pasiva 3D facilitan la recepción de alertas sobre el tráfico o situaciones de peligro en la ruta.
Las pantallas con tecnología pasiva 3D facilitan la recepción de alertas sobre el tráfico o situaciones de peligro en la ruta.larazon

La tecnología digital se introduce de lleno en el automóvil para cambiar por completo el cuadro de instrumentos, con nuevas formas y una mejor visualización.

El cuadro de instrumentos de los automóviles ha experimentado un notable avance en los últimos años con la llegada de las nuevas tecnologías, pasando a la era digital y olvidando los clásicos relojes analógicos, que se han convertido en un elemento de la historia. Ya son numerosas las marcas que han introducido pantallas de 12 pulgadas o más en la instrumentación del vehículo que se pueden configurar según los gustos y necesidades del conductor, y ahora Bosch quiere ir un paso más allá introduciendo la visualización tridimensional en el automóvil.

En un futuro no muy lejano, las pantallas digitales desempeñarán un papel clave en la interacción entre conductores y sus vehículos, y la visualización 3D será un elemento decisivo en esta nueva forma de mostrar la información, un avance que contribuirá a la mejora de la seguridad al volante mediante un efecto tridimensional realista que capta la atención del conductor de una forma más rápida que al mostrarse en las pantallas tradicionales.

Si en el cine las pantallas 3D potencian los efectos especiales y el valor de entretenimiento de una película, en el cuadro de instrumentos de un automóvil “la profundidad de campo de la pantalla permite a los conductores captar información visual importante con mayor rapidez, ya sea de un sistema de asistencia o de una alerta por atasco de tráfico”, dice el Dr. Steffen Berns, presidente de Bosch Car Multimedia.

Las alertas que aparecen en la pantalla son más obvias y urgentes, y al aparcar, la imagen de la cámara trasera es más realista, lo que permite detectar mejor los obstáculos que hay en la trayectoria del coche, haciéndose una idea de cuánto espacio queda entre el parachoques trasero y la pared de un parking. Al circular por calles estrechas, el efecto 3D también juega un papel decisivo, ya que la profundidad espacial de la pantalla del mapa de navegación deja claro la situación del vehículo en cada momento.

Estas nuevas pantallas utilizan una tecnología 3D pasivaque no necesita componentes adicionales como las gafas 3D o el ‘eye tracking’, de manera que su utilización es más sencilla y su adaptación a los actuales tableros de instrumentación mucho más sencilla. El potencial de negocio es importante, ya que las previsiones apuntan que el mercado mundial de pantallas para vehículos se duplicará, pasando de 13.400 millones de euros a 26.700 millones de euros en 2025, según un estudio de Global MarketInsights.

Los formatos se adaptarán a las necesidades de cada fabricante y de cada modelo concreto, con pantallas planas o curvadas de diferentes tamaños, y a veces con formas inusuales como redondas o con esquinas recortadas. Además, la interacción del conductor y el automóvil podrá hacerse por voz o de forma táctil mediante un avanzado sistema de retroalimentación táctil.

Las pantallas digitales han cambiado la forma de interactuar con el automóvil, y la tecnología 3D ofrece muchas más posibilidades de mejora en seguridad.