Premio Planeta 2019, poner el talento al alcance de los lectores

La mayor satisfacción que puede experimentar una persona a la hora de leer un libro es que lo haga por mero placer. Que, al tener un volumen entre sus manos, no pueda parar de hacer pasar las páginas sintiendo que las pupilas van por delante de la capacidad de asimilar la historia. Javier Cercas asegura que "los libros cambian nuestra manera de percibir el mundo y son capaces de salvarnos". Y en esto coincide Manuel Vilas, quien no duda en reivindicar la utilidad de la literatura, gracias a la cual "sigo vivo" y que define como "un paisaje maravilloso que te hace crecer como ser humano". Ambos escritores tienen, además de la profesión, varias cosas en común: comparten la misma perspectiva sobre su trabajo, así como una gran amistad que ha aumentado a raíz del Premio Planeta 2019. Cercas ha sido el ganador de este año, con su novela "Terra Alta", mientras que Vilas quedó finalista con "Alegría".

Esta mañana ha tenido lugar la presentación de ambos libros en el Instituto Cervantes de Madrid, donde han asistido figuras como Carmen Calvo -vicepresidenta del Gobierno- y donde José Creuheras, presidente del Grupo Planeta, ha asegurado que ambas obras "son muy diferentes, pero tienen un nexo en común: te hacen reflexionar". Asimismo, la periodista Cristina Villanueva, que se ha encargado de conducir la presentación, ha hecho alusión a que ambas novelas comparten "la búsqueda de una persona de arraigarse en el mundo y en el amor". "En la obra de Manuel ese sentimiento está en la familia, en la celebración por la alegría de tenerla", resume Cercas, "mientras que en la mía el protagonista -Melchor- es un chaval que nace en un barrio pobrísimo, un urbanita que, cuando se muda a Terra Alta, encuentra una especie de patria en el sentido que le dio Cervantes a la palabra".

"Terra Alta", ganadora del galardón, es "una novela que en las diez primeras líneas ya te introduce dentro de la historia, no sé cómo demonios lo hace", ha afirmado Vilas sobre la obra de su compañero. "Es hipnótica y tiene un ritmo trepidante, como si fuera un enorme laberinto muy bien organizado", explica, añadiendo que, en cuanto al uso del lenguaje, Cercas ha realizado "un pulso expresivo tremendo: mientras te va metiendo en órdenes psicológicos sin notarlo, va tocando temas importantes de la condición humana, como la justicia, la venganza o el odio". Con esto, la novela policíaca que publica Cercas, que según Vilas es "una reinvención como escritor pero manteniendo su marca", coloca a un protagonista atormentado en Terra Alta, un lugar donde, aparentemente, no ocurre nada y donde comenzará una vida nueva.

Por su parte, "Alegría" es, en palabras de Cercas, "una obra precisa y completa, entendida como una adhesión sin resquicios a lo real". "La realidad es terrible, pero estamos vivos y eso es un milagro", continúa el compañero de Vilas, "es algo fugaz y no somos conscientes de ello, por lo que es necesario que, como ocurre en el libro de Manuel, haya una celebración de estar vivos". En la obra que quedó como finalista, el narrador experimentará una serie de viajes y no solo por el mundo, sino también por sus sentimientos, que harán reflexionar al lector sobre el presente y, en especial, sobre la capacidad de experimentar esa emoción que da título a la obra.

El Premio Planeta de este año ha cumplido, de nuevo, las expectativas del grupo que, como ha apuntado Creuheras, es el de "poner el talento al alcance de los lectores". Ambos escritores han afirmado con anécdotas cómo la sociedad siente este galardón como suyo y que forma parte de la historia de nuestro país. Tal es así que "44 millones de ejemplares de Premios Planeta se han vendido en España, ya sea de ganador o de finalista".