Cercanía con los agricultores y soluciones para el campo

Mientras los agricultores y ganaderos de toda España se mantienen en pie de guerra contra el Gobierno de España -Asaja moviliza al campo los días 2 y 5 de marzo en Ponferrada y León-, para exigir precios justos en los productos y una Política Agraria Comunitaria (PAC) fuerte ante la incertidumbre actual por las exigencias medioambientales, así como mostrar su malestar por la subida del salario mínimo que perjudica sobremanera al sector agrario, en Castilla y León, por su parte, se está intentando mostrar cercanía con el sector agrario y, sobre todo, aportar soluciones al campo. Especialmente en lo que se refiere al «necesario» equilibrio de la cadena alimentaria, que conforman los productores, los transformadores y los distribuidores.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, aprovechaba la reunión extraordinaria convocada por el ministro socialista Luis Planas en Madrid para, en primer lugar, urgir al Gobierno a tomar cartas en el asunto pronto para resolver el conflicto que tiene abierto con el campo y, en segundo término, poner encima de la mesa algunas de las medidas que se están aplicando en esta Comunidad para favorecer el equilibrio de la cadena alimentaria o facilitar el acceso de los jóvenes a esta actividad.

Entre ellas, Carnero citaba la creación de una Junta de Arbitraje y Mediación para los contratos agrarios con el objetivo de que cualquier conflicto se pueda dirimir con agilidad y sin necesidad de acudir a la Justicia ordinaria, lo que elevaría los gastos y los tiempos de resolución; la creación de un Observatorio de precios de los alimentos; o la próxima apertura de otro organismo que velará por los costes de los productos ya transformados.

Seguros y una PAC fuerte

Corregir los desequilibrios actuales pasan también, según exponía el consejero en este encuentro, por conseguir que el dinero que venga de la PAC el próximo periodo sea al menos el mismo que en el actual y conseguir que haya seguros agrarios atractivos para, por un lado, garantizar la renta del profesional cuando vienen mal dadas por la inestabilidad meteorológica, y, por el otro, para atraer a los jóvenes a la actividad agraria, además de con ayudas directas, acceso a la tierra o mediante transmisiones de explotaciones agrícolas.

«Si queremos ser sostenibles es fundamental también que los agricultores y ganaderos también puedan serlo en lo económico y social», apuntaba Carnero.

Sobre los seguros agrarios, el consejero ponía en valor el grupo de trabajo que mantiene abierto con Agroseguro, las organizaciones profesionales agrarias y el propio Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para conseguir que esta protección sea lo más fascinante posible para la gente del campo. «El sector requiere de un Ministerio fuerte para hacer frente a estos problemas y resolver con garantías el actual conflicto», finalizaba Carnero, para quien el campo vive hoy un «momento crucial».