Adiós a Ciarán y Domingos: Castilla y León desactiva las alertas por fuertes vientos e inundaciones

Dice el sabio refranero que "tras la tempestad, siempre llega la calma". Y tras varios días intensos en lo climatológico con una sucesión de borrascas que han traído fuertes vientos y agua, primero con Ciarán y después con Domingos, parece que la situación está regresando a la normalidad.

Tal es así, que a lo largo de este lunes, la Junta de Castilla y León desactivará la alerta por vientos iniciada el pasado 1 de noviembre y el Plan de Protección Civil ante el riesgo de inundaciones en Castilla y León (INUNcyl), activado ante el aumento de los caudales de algunos ríos en la Comunidad, en concreto en Burgos y Soria.

Así lo ha avanzado el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación de Territorio, Juan Carlos Suárez Quiñones, durante una visita a Burgos, donde apuntaba a esta mejoría de las condiciones meteorológicas que permitirán desactivar las alertas en Castilla y León.

En este sentido, cabe recordar que el Servicio de Emergencias 1-1-2 ha registrado estos días hasta 1.219 incidencias relacionadas con el viento, según se indica en su página web.

"Las previsiones meteorológicas son ahora más benignas, y aunque ahora viene frío no hay riesgo de inundación ni de vientos extraordinarios”, explicaba el consejero, que también avanzaba que sobre las dos de la tarde se desactivará igualmente el Plan de Protección Civil ante inundaciones (INUNcyl), que se había activado para Burgos y Soria, puesto que “se da las condiciones para su desactivación”.

Suárez Quiñones aprovechaba estos anuncios para agradecer el trabajo y dedicación de estos días de los servicios de emergencias, el personal de carreteras, trabajadores públicos, también empresas privadas, y los delegados territoriales, encargados de vigilar y coordinar los planes de emergencia. "Han hecho un gran trabajo para que no haya habido males mayores en este episodio tan intenso", decía.