El sorprendente y deslumbrante pueblo medieval para escapar del calor este verano

Se trata de una de las provincias más castigadas por la despoblación de España, pero es sin duda, una de las más bonitas. Un auténtico paraíso patrimonial y natural que atrae año tras año a miles de visitantes. Desde su capital, con el románico por bandera, a las Arribes del Duero, las Lagunas de Villafáfila... Y en ese entorno mágico sobresale una comarca, la de Sanabria, con muchos encantos, en especial el Lago más grande de España y uno de los pueblos más bonitos del territorio nacional, que está más de moda que nunca y que sorprende y deslumbra no solo al visitante que llega a él por primera vez sino a los que repiten año tras año.

Estamos refiriéndonos a Puebla de Sanabria, una localidad que parece detenida en el tiempo por su empedrado medieval y de hecho uno sus grandes momentos tiene que ver con esta época de la historia al rememorar a mediados de agosto un mercado medieval digno de ver. Edificios de piedra rocosa, jalonados por unas amplias balconadas inundadas de vistas flores y unas vistas panorámicas que nos invitan a recorrer los alrededores.

Un municipio con mucha historia y que cuenta con atractivos bienes patrimoniales pero también gastronómicos, en especial a los que les guste el dulce. Imponente y en las alturas se yergue un castillo construido a mediados del siglo XV por don Rodrigo Alonso de Pimentel y doña María Pacheco, los Condes de Benavente. Construido en sillería de granito, está en perfecto estado y sobresale su Torre del Homenaje.

Dentro de la fortaleza también nos podemos encontrar con el Centro de Visitantes en la "Casa del Gobernador", que alberga la Oficina Municipal de Turismo y donde muestra al visitantes las distintas rutas que se pueden hacer por la provincia zamorana o la Casa de la Cultura.

Un paseo por sus calles nos muestra su riqueza y uno descubre el por qué está declarado Conjunto Histórico-Artístico. Casas con blasones y medallones y con numerosas posadas reales y tiendas donde avituallarse con exquisitos y únicos productos de la tierra.

Circuncindando la villa nos encontramos con su muralla, excepcional y que data de los siglos XII y XIII, y el barrio e la villa se encuentra el Convento de San Francisco. Y justo debajo de la muralla uno de los lugares idílicos de la villa como es la pradera anexa al río Tera, que se llena en los días de calor para refrescarse e incluso tomar un tentempié en los chiringuitos que existen al lado.

Y alrededor, numerosos sitios por descubrir, empezando por el Lago de Sanabria y con sus dos playas atestadas de gente en los días de más calor: El Puente, con un mercadillo todos los lunes donde se puede encontrar de todo y con una concentración motera que tendrá lugar del 12 al 14 de julio. También en la zona una ruta idílica para conocer la cascada de Sotillo y el pueblo de San Martín de Castañeda, antesala de la Laguna de los Peces. Otro lugar que uno no debe perderse.

Pero no nos podemos olvidar de otras tres atracciones que nos van a sorprender. Por un lado la denominada "capilla sixtina" ubicada en una pequeña iglesia de Otero de Sanabria. El pueblo de Rihonor de Castilla, a medias entre Zamora y Portugal, con dos husos horarios diferentes o el Centro del Lobo en Robledo de Sanabria donde se pueden ver en libertad a esta especie, tan noticiosa en los últimos meses.

En definitiva, un lugar único e imprescindible para descubrir y para escapar de los calores que según dicen los expertos, nos esperan.