Sucesos

Fuerte golpe al epicentro del tráfico de cocaína en Cataluña

Los Mossos detienen a 46 narcotraficantes en el barrio de Sant Roc en Badalona

En el operativo policial para detener a las 46 personas acusadas de vender cocaína participaron 450 agentes de Mossos d'Esquadra.
En el operativo policial para detener a las 46 personas acusadas de vender cocaína participaron 450 agentes de Mossos d'Esquadra.MOSSOS D'ESQUADRAEuropa Press

Los Mossos d’Esquadra han detenido a 46 personas por presuntamente vender cocaína en el barrio de Sant Roc de Badalona (Barcelona), 11 de los cuales han ingresado a prisión, ha informado la policía catalana en un comunicado.

En el operativo policial realizado el lunes 11 de julio participaron 450 agentes, que realizaron 27 entradas en domicilios y despachos profesionales de los municipios barceloneses de Badalona (20), Sant Adrià de Besòs (2) y Barcelona (2) y los tarraconenses del Vendrell (2) y Calafell (1).

La policía catalana incautó 5.012,23 gramos de cocaína, 4.059 de sustancias de corte, productos para la adulteración y material de embalaje, seis armas de fuego cortas, un rifle, munición y 194.095 euros en efectivo.

También intervino 12 inmuebles y 11 vehículos, algunos de gamma alta, y bloquearon las cuentas corrientes de 15 personas físicas y dos de jurídicas.

El principal punto de venta cocaína se ubicaba en un piso de la calle Córdova del barrio de Sant Roc de Badalona y los beneficios diarios obtenidos ascendían a los 15.000 euros.

Los detenidos presuntamente conformaban una “organización criminal jerarquizada y estructurada” integrada por dos grupos independientes: una rama facilitaba la droga y la otra, arraigada en el barrio, proporcionaba infraestructura para la venderla.

Había ‘jefes’ que captaban a los integrantes de la banda y conseguían la cocaína; ‘cocineros’ que la preparaban; un grupo que la dosificaba y distribuía en cucuruchos; otros que la transportaban al punto de venta; ‘vendedores’; ‘vigilantes’ que detectaban la presencia policial, y encargados de blanquear los beneficios económicos.

Los detenidos realizaron “grandes operaciones” para comprar inmuebles, vehículos y material informático por valor de 757.800 euros, y utilizaban sociedades pantalla o personas intermediarias para ocultar su identidad.

Los datos del Ministerio de Interior no engañan, y ahora indican que Cataluña es la zona con más denuncias relacionadas con el tráfico de drogas, y lo más grave, se han duplicado en diez años, llegando ahora casi a las 4.000, más de diez al día.

Son incontables las informaciones que no niegan estos datos. La actividad en según que zonas de Barcelona (con Ciudad Meridiana y el Raval a la cabeza), un cierto repunte de la heroóna, el habitual consumo de cocaína (de los más altos de Europa), el inmenso aumento del cultivo de marihuana (hace años era por la crisis económica, ahora por la pandemia)...

Hace precisamente diez años, un cargo de la Policía Naciona, especialista en el asunto, explicó a este diario que Cataluña se había confirmado como la puerta de entrada a Europa de la droga. La situación no ha cambiado, ya que recientemente se volvió a señalar a Tarragona (Delta del Ebro) como el punto de partida del hachís para el continente.

El Ministerio del Interior, también, señala, por ejemplo, que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad realizaron a lo largo del año 2019 un total de 24.171 detenciones por delitos de tráfico de drogas, lo que supone un aumento del 12% con respecto a 2018, año en el que se practicaron 21.664 arrestos, según el informe del Ministerio del Interior que recoge este tipo de actuaciones y que sitúa a Cataluña en la cabeza de comunidades en el incremento por el número de denuncias, con una variación del 50,86%.

Siempre según los datos anuales del Ministerio del Interior, los cuerpos de la Guardia Civil, Policía Nacional y de Aduanas arrestaron a 839 personas por tráfico de drogas en Cataluña en 2019; el 14,46% más que durante los doce meses del año anterior. Además, sumando las cifras de los Mossos d’Esquadra, la comunidad lideró el pasado año las denuncias por este ilícito: más de 2.100; lo que supone un incremento del 50% frente a 2018. La comunidad autónoma se encuentra a la cabeza de las incautaciones de heroína en el conjunto de España, lo que reafirma citada idea de cierto repunte del consumo de este opiáceo en Barcelona.

Uno de los puntos principales de tráfico de heroína precisamente sigue siendo el clásico, el siempre polémico barrio de La Mina,situado entre Barcelona y Sant Adrià del Besòs. Pero no es ni mucho menos el único estupefaciente presente en la zona. Siguiendo la pista de varios tiroteos que tuvieron lugar en diciembre de 2020 en la frontera invisible que separa ambos municipios, los Mossos d’Esquadra llegaron hace muy pocos días hasta una organización criminal, cuyos integrantes se escondían en los barrios de La Verneda, el Besòs y de La Mina, dedicada principalmente al cultivo y tráfico de marihuana. Todo apunto a que se trataba de una pelea de bandas rivales para controlar el tráfico de cannabis en estas zonas. Es precisamente el repunte de los enfrenatemientos entre grupos de narcotraficantes enemigos entre ellos lo que lleva a pensar en el fuerte aumento de las denuncias en Cataluña relacionadas con este ámbito.