Urbanismo

Un corredor verde para unir, por fin, la Zona Franca con el centro de Barcelona

El paseo, exclusivo para buses y bicicletas, servirá para dar salida al nuevo barrio residencial de la Marina del Prat Vermell

Recreación del futuro paseo verde entre la Zona Franca y el centro de Barcelona
Recreación del futuro paseo verde entre la Zona Franca y el centro de BarcelonaAyuntamiento

Hace tiempo que las administraciones catalanas tienen el ojo puesto en la Zona Franca de Barcelona y sus alrededores. Tradicionalmente ha sido un barrio aislado, más asociado a la delincuencia ochentera que al uso fabril que se le presuponía. En los últimos tiempos, sin embargo, ha servido para ubicar oficinas y vivienda.Pero tiene un problema: Montjuïc. La colina barcelonesa se antoja como un muro infranqueable para incorporar el barrio a la ciudad. La línea 9 le ha dado un respiro, pero sigue estando muy lejos de, por ejemplo, el centro de la capital catalana. Así pues, el Ayuntamiento de Barcelona se ha propuesto unir por el litoral los barrios de la Marina del Prat Vermell y la Zona Franca con las Drassanes y el centro de la ciudad. Y lo hará gracias un paseo que ofrecerá una conexión a pie, en carril bus y carril bici, siguiendo el puerto de Barcelona. De momento, se ha iniciado la redacción del proyecto ejecutivo, y está previsto empezar las obras a finales de 2024 por la plaza de las Drassanes.

El objetivo principal del nuevo corredor es mejorar la conectividad de la Marina del Prat Vermell, un barrio de nueva construcción que acogerá a 28.000 habitantes y tendrá 12.000 viviendas. Por eso, aparte de la nueva conexión portuaria, también está previsto transformar el paseo de la Zona Franca durante el próximo mandato para que deje de ser una barrera entre los barrios.

El planteamiento reserva unos 300.000 metros cuadrados de techo para usos comerciales con el objetivo de generar empleos del sector terciario. Además, reserva un 20% de las 75 hectáreas que ocupa el barrio a las zonas verdes, con la remodelación de zonas como el Parc de les Tretze Roses que conectará con la montaña de Montjuïc, en unas obras que ya están en marcha.

La obra supondrá una inversión de 9 millones de euros, financiados por el Ayuntamiento y el Puerto de Barcelona, y la previsión es poder acabar toda la conexión entre finales de 2025 y principios de 2026. «Se trata de garantizar que en un máximo de dos o tres años los vecinos de la Marina puedan llegar a las Drassanes en 10 minutos», afirmó la teniente de alcaldía Janet Sanz, que quiere que deje de ser un «barrio aislado». Para ello, se creará una nueva línea de autobús que recorrerá este trazado.

En total se construirán tres kilómetros de corredor urbano entre el paseo de la Zona Franca y la plaza de las Drassanes. El recorrido constará de tres tramos. El primero comienza en las Drassanes y llega hasta el puerto de Barcelona, y consta de un carril bici y uno de bus ya existentes. El segundo es de acceso restringido y pasa por las instalaciones portuarias, y el tercer tramo es el que llega al paseo de la Zona Franca pasando por las calles de la Verge del Port y Motors.

El consistorio se plantea esta nueva conexión, que se ha acordado con el puerto de Barcelona como solución provisional a la futura transformación de la ronda del Litoral para ganar espacio para el peatón. Este proyecto, acordado entre el Ayuntamiento y el Gobierno, prevé trasladar la ronda a ras de suelo, una vez se haya hecho las pertinentes operaciones urbanísticas previas.