Día Mundial de la Salud Bucodental

El miedo y el dinero retrasan las visitas al dentista

Un 35% de las personas que necesitan tratamiento lo aplazan y de éstas, un 29% lo hace por su elevado coste y un 22% prefiere esperar a que la economía mejore. En este contexto, cabe señala que 8 de cada 10 españoles ha tenido caries alguna vez en su vida

Los colegios de odontólogos de Burgos, Palencia, Soria, Valladolid y Zamora alertan del riesgo que supone retrasar un tratamiento dental
Los colegios de odontólogos de Burgos, Palencia, Soria, Valladolid y Zamora alertan del riesgo que supone retrasar un tratamiento dentallarazonLa Razón

Los españoles tenemos una buena autopercepción de la salud dental o al menos eso es lo que refleja el Barómetro de Salud Bucodental en España 2024 elaborado por los Institutos Odontológicos, que indica que ésta se valora con un 7,1, por debajo de la salud mental (7,6) y a solo una décima de la salud física (7,2). Sin embargo, el 79% de los encuestados admite haber tenido caries alguna vez en su vida y al respecto el estudio pone de manifiesto que existen algunos factores que en ocasiones podrían explicar que el cuidado dental no sea siempre el adecuado, como es el miedo a los tratamientos o el gasto económico.

En este sentido, en cuanto a la periodicidad de las visitas al dentista, el 57% de los participantes en la encuesta asegura acudir a consulta al menos dos veces al año, mientras que el 25% lo hace una sola vez y solo el 5% reconoce que se visita una vez cada dos años o más. En cualquier caso, la principal motivación a la hora de ir al dentista es la de garantizar la salud (55%) y únicamente un 6% lo hace por estética.

Entre las principales razones que los encuestados alegan para no acudir a consulta con más frecuencia figura el miedo (22%), que se genera básicamente a partir de la asociación entre el tratamiento y el dolor (75%) y por el coste económico que ello puede suponer (39%). De hecho, un 5% de las personas que, pese a necesitar un tratamiento, deciden aplazar la visita al dentista, las cuales representan un 35%, lo hacen movidas por este miedo, aunque en su mayoría la motivación real es de índole económica. Así, un 29% reconoce que prefiere aplazar el tratamiento por su elevado coste y un 22% admite que prefiere esperar a que la economía mejore. Entre los tratamientos más realizados, destaca la limpieza bucal (73%), la revisión bucodental (53%) y el empaste (24%).

Cepillado dental

Otro de los indicadores que arroja información acerca de los hábitos relacionados con el cuidado bucodental es el relativo al cepillado de los dientes. En este sentido, pese a que el 78% de los encuestados dice cepillárselos dos veces o más al día, el 17% admite que solo lo hace una vez al día y un 5% reconoce no cepillárselos diariamente. Las principales razones por las que algunos no practican este hábito varias ocasiones al día son la pereza (27%), el estar fuera de casa (27%) y el olvido (17%). En cualquier caso, en cuanto al tipo de cepillo más usado, el eléctrico pierde posiciones respecto al 2022 para equipararse al de plástico, cuyo uso ha aumentando para representar ya el 45%, y la frecuencia con la que esta herramienta se renueva es en un 10% de los casos cada mes o menos, en un 26%, cada dos y en un 38%, cada tres meses.

La mayoría de los encuestados, para mantener su higiene bucal usa el cepillo junto a pastas dentífricas especiales (63%), mientras que un 56% recurre al cepillado lingual, el 68% usa el hilo dental o cepillo interdental y el mismo porcentaje complementa el cepillado con un colutorio o enjuague bucal.

Los niños llegan tarde

En cualquier caso, ocho de cada diez encuestados dicen haber tenido caries y un 52% comenta que sus hijos también las han tenido. Sobre la población infantil, cabe señalar que, pese a que la Sociedad Española de Odontopediatría recomienda llevar a los niños al dentista antes del primer año de vida, solo se sigue este consejo en el 14% de los casos. De hecho, la edad media en la que los niños españoles acuden a la primera visita se sitúa en los 5,8 años, lo que supone un retraso de casi cinco años respecto a la edad recomendada.

Por último, acerca de los factores con un mayor peso a la hora de elegir la clínica en la que visitarse, el trato amable y cercano es el principal (43%), por delante de la proximidad a casa (35%) y las recomendaciones de padres y amigos (22%). Sobre este último punto, cabe señalar que preferimos guiarnos por las recomendaciones de amigos (19%), padres (12%) o de la pareja (10%) que de las reseñas de Google (6%).

Por lo general, solemos estar satisfechos con la clínica de nuestra elección, como demuestra el dato que apunta que el 74% de los encuestados no ha cambiado de clínica en los últimos dos años ni tiene intención de hacerlo, algo que reafirma el hecho de que ha aumentado la fidelidad a nuestro dentista al pasar de una media de cinco años a siete. Sin embargo, aún hay quien opta por el cambio y entre este grupo destacan aquellos que lo hacen tras haber tenido una mala experiencia, que han pasado de representar el 22% a ser el 29%.