La Generalitat valenciana endurecerá las medidas existentes antes de solicitar un confinamiento domiciliario

Miedo para muchos, alivio para unos pocos. La posibilidad de que la Comunitat Valenciana tenga que volver a un confinamiento domiciliario debido a la gravísima evolución de los datos ha vuelto a marcar la agenda política, pero hace meses que acapara buena parte de las conversaciones cotidianas. Tanto es así, que la Generalitat ha tenido que salir a desmentir bulos que han ido circulando sobre este asunto.

Desde Presidencia de la Generalitat valenciana quieren dejar muy claro que la posibilidad de que se solicite al Gobierno central que decrete un confinamiento domiciliario para los valencianos no está, a día de hoy, sobre la mesa. Afirman que antes podrían endurecerse las medidas existentes o ampliar el número de municipios confinados e insisten en que su objetivo principal es hacer cumplir las anunciadas la víspera de Reyes y que entraron en vigor el pasado día 7 de enero.

Insisten además en que para saber si las últimas restricciones adoptadas- que han supuesto el confinamiento de 29 municipios, adelantar el toque de queda a las diez de la noche o el cierre de la hostelería a las cinco de la tarde- hay que esperar de siete a diez días. Será entonces cuando se tendrá un análisis de la situación.

La postura que se defiende desde Presidencia de la Generalitat valenciana es la que ha hecho hoy pública el portavoz del PSPV, Manolo Mata. “En la Comunitat Valenciana se han tomado las decisiones más duras porque nos encontramos en una situación en la que “los valencianos y valencianas ya estamos prácticamente confinados”.

Sin embargo, los partidos que conforman junto a los socialistas el Gobierno valenciano no comparten esta visión. El portavoz de Compromís, Fran Ferri, ha defendido que aunque el confinamiento total de la población no es algo que pueda decidir la Generalitat, “con los datos encima de la mesa, tendríamos que ver si es posible”. Además, ha recordado que su formación lleva meses reclamando medidas más duras.

Además, el diputado de Unides Podem en Les Corts Ferran Martínez ha vuelto a defender la necesidad de un nuevo confinamiento y que se paralicen las actividades no esenciales, así como que se frene la vuelta a las aulas, puesto que el aumento de contagios coincide con una ola de frío que dificulta mantener la ventilación de las clases.