Amamantando la vida

Claves para elegir el biberón más adecuado para un bebé

Es importante que la velocidad de flujo, es decir la cantidad de leche que sale de la tetina y la rapidez con la que fluye, sea la adecuada

Cada bebé necesita un biberón
Cada bebé necesita un biberón María Díez Pérez

Cuando se hace necesario suplementar con leche materna y la madre opta por hacerlo con un biberón, es primordial encontrar el que se ajuste a los requerimientos de cada bebé. Hay algunas consideraciones importantes que debes tener en cuenta, dado que la oferta de biberones en el mercado es bastante amplia, en este artículo, discutiremos algunos factores clave que debes considerar al elegir un biberón para ofrecer el alimento a tu bebé.

La forma de la tetina del biberón es importante para la alimentación del bebé. La tetina es la parte del biberón por donde sale la leche, su forma puede afectar la cantidad y la velocidad de leche que el bebé ingiere y la manera de succionar.

Es importante que la velocidad de flujo, es decir la cantidad de leche que sale de la tetina y la rapidez con la que fluye, sea la adecuada para cada bebé. En el mercado existe generalmente tres velocidades de flujo (lenta, media y rápida), tener en cuenta que una misma velocidad de flujo varía mucho de una marca a otra. Por regla general se suele elegir una velocidad de flujo tomando como referencia la edad del bebé, no obstante, se debe de considerar también la capacidad y fuerza de succión de cada bebé para extraer la leche. El bebé debe de ser capaz de controlar la cantidad de leche para producir una buena succión. Si la velocidad de flujo es demasiado rápida, este no podrá gestionar eficazmente tragar y respirar a la vez, provocando que se atragante con frecuencia. Contrariamente si el flujo de leche es demasiado bajo, el bebé puede sentirse frustrado, perdiendo interés, y en lugar de succionar para obtener la leche puede que muerda la tetina o tal vez, se muestre nervioso e impaciente por no recibir el alimento, en consecuencia, tragará más aire al aspirar continuamente para obtener el alimento, y por ello tener problema de gases y cólicos.

Con ello no quiero decir que se necesite comprar tetinas especiales ni tampoco biberones caros. Es necesario tener en cuenta aquellos biberones que se publicitan como “tetinas que no gotean” es decir de flujo variable, que garantizan que el propio bebé, a través de su capacidad de succión controla el flujo de salida de la leche. En honor a la verdad se trata de biberones que no gotean al colocarlos boca abajo, pero el que no gotee no es indicativo de que el bebé sea quien regule la rapidez o lentitud del flujo a través de la succión, ya que cuando el bebé empieza a succionar y salen las primeras gotas de leche, se rompe el vacío, igualándose la presión del interior del biberón con la exterior y, en consecuencia, el flujo de salida de leche en la mayoría de estos biberones es excesivamente alto. Por lo tanto, no son adecuados para todos los bebés, es necesario como he mencionado valorar las características individuales de cada lactante, y es posible que debas experimentar con diferentes tipos de tetinas antes de encontrar el caudal de la salida de leche que fluya a la velocidad adecuada para tu bebé.

La forma de la tetina es también fundamental, esta afecta al movimiento de la lengua. Cuando el bebé se dispone a mamar, sus labios deben sellar el pecho y afianzar el pezón, que aumentara su longitud dentro de la boca, para que el bebé con su lengua pueda situarlo unos milímetros más adelante del punto en el que se unen el paladar duro y blando, en esta zona la lengua presionara el pezón hacia el paladar para que la leche fluya. Por lo tanto, esta coreografía que el bebé realiza para alimentarse al pecho debe ser imitada al máximo con el biberón. Para que el bebé realice en primer lugar un buen sellado de su boca con el biberón es mejor utilizar una tetina de base ancha que una estrecha, de este modo sus labios quedaran abiertos, permitiéndole que una buena porción de la tetina entre en su boca. En este caso, la longitud de la tetina juega un papel importante, dado que, las tetinas no se elongan como lo hace el pezón, por lo que, para garantizar una correcta alimentación, es necesario seleccionar una tetina más larga que los pezones de la madre en reposo.

De este modo la tetina quedará colocada profundamente en la boca del bebé, permitiéndole que su lengua la presione hacia el paladar de forma similar a como presiona el pezón cuando mama del pecho. En este momento, se debe añadir un componente adicional, es decir, la figura de la tetina, la cual afectará la posición y los movimientos de la lengua. Si la selección de la tetina no es adecuada, el bebé puede desplazar su lengua hacia atrás o retraerla.

Aunque puede suceder con cualquier tipo de tetina, es muy frecuente que ocurra con las tetinas anatómicas, las cuales imitan en su forma a un pintalabios, es decir, tienen un lado redondeado y otro plano y alargado. Estas suelen detener el flujo de leche, son más propensas a colapsar, siendo más fácil que con ellas el bebé realice movimientos hacia arriba y hacia abajo semejantes al de masticar chicle, e influir en detrimento de un buen intercambio entre pecho y biberón. En cambio, varios estudios han demostrado que cuando un bebé succiona de una tetina que se asemeje lo más posible al pezón de la madre, es decir de diseño redondeado, facilita que el bebé abrace y utilice su lengua para obtener y controlar el flujo de leche, lo que lo convierte en un participante activo durante la alimentación.

En cuanto a la textura de la tetina, se comercializan dos materiales, látex y silicona, su elección va a depender del gusto de cada bebé. Tan solo subrayar que las tetinas de látex son más suaves y flexibles que las de silicona, pero tienen como inconveniente que retienen más fácilmente olores y se deterioran antes.

En conclusión, elegir el biberón adecuado para dar suplemento a un bebé alimentado al pecho puede ser una tarea desafiante. Asegúrate de tener en cuenta los factores mencionados anteriormente y siempre sigue las recomendaciones de un profesional experto en lactancia con el objetivo de brindar al bebé una alimentación segura y efectiva que no interfiera con la alimentación al pecho.

Cintia Borja es consultora certificada IBCLC

Puedes enviar tus consultas a lactanciamaterna@larazon.es