Con la miel en los labios

Diego Carretero se llevó la única oreja de la primera de Albacete

Se lidiaron toros de El Montecillo

Diego Carretero en Albacete
Diego Carretero en AlbaceteAlcolea

Comenzó una nueva edición de la Feria de Albacete, la más destacada de cuantas se dan en septiembre -y una de las más importantes del calendario-, con un festejo en el que, en el día de la patrona, la Virgen de los Llanos, se daba cancha a tres toreros de la tierra que ya han dado sobradas muestras de su buen hacer.

Enfrente tuvieron un encierro de El Montecillo, desigual de presentación, aunque todos con la seriedad propia de esta plaza, y de juego, así mismo, dispar aunque con opciones de triunfo en varios, especialmente primero y tercero.

La primera oreja de la tarde, y a la postre única del festejo inaugural del serial, fue para Diego Carretero. Se la arrancó a un toro que perdió las manos en el peto y que también rodó por el albero tras el tercio de banderillas. Carretero le fue dando confianza y mimo hasta afianzarlo lo suficiente para ligar varias series en redondo antes de gustarse al natural, alargando la muleta hasta muy atrás y sin dejarse tocar nunca la tela.

Se le puso a tiro la puerta grande y quiso asegurarla desde el primer momento, aunque el toro manseó en el primer tercio y llegó a la muleta cabeceando y tirando gañafones. Desentendido y a la defensiva. El de Hellín se empeñó en torear por lo moderno y no se metió con él, conformándose con aquella primera oreja.

Fue ovacionado el castaño primero al hacerse presente en el ruedo. Toro de imponente arboladura con el que se lució Andrés Palacios a la verónica y en las chicuelinas con que quitó.

Tras las probaturas iniciales se estiró al torear en redondo, dejando un par de series con empaque. Al natural su oponente tuvo menos tranco y la cosa salió más embarullada, si bien dejó un par de trincherazos de cartel. Todo lo emborronó con la espada.

Volvió a gustar al torear de capa al sobrero que hizo cuarto, también protestado por cojo, una evidente merma de facultades que influyó de manera notable en su comportamiento, haciendo estéril el esfuerzo de su matador.

Acudió de lejos el segundo al caballo, empujando dejándose pegar, lo que acusó en el último tercio, al que llegó un tanto parado y tardeando. Faena técnica y tesonera de Tendero, que pasó su turno intentando alargar, en vano, la embestida del animal.

Romaneó y derribo el imponente quinto al caballo, llevándose luego un montón de mantazos inútiles en una lidia caótica. Luego el de El Montecillo no humilló nunca, siempre con la cara arriba y enterándose. Imposible el lucimiento. Lo intentó el de Albacete pero todo fue inútil.

LA FICHA

Albacete, 8 de septiembre. Primera de feria Más de media entrada.

Toros de El Montecillo, el cuarto corrido como sobrero, desiguales de presentación y juego, destacando primero y tercero.

Andrés Palacios (de blanco y azabache), dos pinchazos, aviso, entera, ovación; entera, ovación.

Miguel Tendero (de purísima y oro), media y descabello, ovación; pinchazo, media, ovación.

Diego Carretero (de obispo y oro), entera, oreja; entera, palmas.