Enfermería
La lesión de Marco Pérez le aparta de Arévalo y Eauze
El joven diestro continúa recuperándose de la fisura de cadera sufrida en Alicante y no podrá torear en los próximos días, aunque su evolución es positiva y se espera su regreso pronto
Marco Pérez no podrá vestirse de luces este fin de semana. El joven torero salmantino, que sufrió una fisura en la cadera durante su actuación en la Feria de Hogueras de Alicante el pasado 22 de junio, continúa convaleciente y sigue centrado en su proceso de recuperación.
A pesar de que la evolución está siendo positiva y dentro de los plazos marcados por el equipo médico, los doctores han considerado que todavía no está en condiciones óptimas para volver al ruedo. Por ello, causará baja en sus dos próximos compromisos: este viernes 5 de julio en Arévalo y el sábado 6 en la localidad francesa de Eauze.
Ambas fechas estaban marcadas en rojo en el calendario del joven espada, que vive una temporada crucial para su proyección. La cita de Arévalo reunía a Ferrera, Pepe Moral y Román, cartel que ahora se verá modificado tras la ausencia del salmantino. En Francia, también se esperaba su actuación con expectación.
Desde su entorno, el mensaje es claro y tranquilizador: “La evolución de Marco Pérez va por buen camino y su fecha de regreso a los ruedos está cada vez más cerca”. El torero se someterá a nuevas pruebas médicas en los próximos días que determinarán con mayor precisión los plazos para su vuelta.
El caso de Marco Pérez no es el de una figura consolidada que se puede permitir parar sin urgencias. Su juventud y la expectativa generada en torno a él hacen que cada actuación sea observada con lupa, y cada baja sea sentida tanto por la afición como por los profesionales que siguen su carrera con atención.
Mientras tanto, el ruedo espera. La prudencia médica se impone a la ambición y el ímpetu del torero. Porque si algo ha demostrado Marco en este inicio de andadura es que tiene valor, hambre y temple. Pero también sentido de la responsabilidad. Y para volver al cien por cien, primero hay que estar bien. Así de claro.