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Primer Nadal - Djokovic de 2021

El serbio vence a Sonego (6-3 y 6-7 [5/7] y 6-2) y reta al español en la final de Roma. No se enfrentan desde la paliza del balear el pasado octubre en la última final de Roland Garros

Djokovic demostró que está en plena forma y ganó a Tsitsipas y a Sonego el sábado, en cuartos y semifinales
Djokovic demostró que está en plena forma y ganó a Tsitsipas y a Sonego el sábado, en cuartos y semifinalesETTORE FERRARIEFE

Ganó Nadal a Opelka por un doble 6-4 a en apenas hora y media y en la final tendrá el primer cara a cara con Djokovic en 2021. El serbio se dio una buena paliza. Comenzó el sábado venciendo a Tsitsipas (4-6, 7-5 y 7-5) en un partido que tuvo que remontar mil veces. Para empezar, en la reanudación de un duelo que había empezado el viernes y que se aplazó por la lluvia. El choque se reanudó con 6-4 y 2-1, con break a favor del griego, pero al número uno del mundo se le puso esa cara de diablo que tanto temen los oponentes. Se agarró a la pista y resurgió en lo que se convirtió en un thriller, porque el heleno es un jugador de cuidado, joven pero ya con muchas batallas y con mucho tenis como para tenerle en cuenta en las grandes citas. Plantó cara al mejor Djokovic y lo volvió a tener contra las cuerdas en el tercer set, con 5-4 y saque. Pero no fue suficiente y la enésima resurrección de Nole le sirvió para pasar ronda. La cita fue muy exigente físicamente y por la tarde le esperaban las semifinales en un torneo comprimido por la lluvia.

Contra Lorenzo Sonego, que se lo ha hecho pasar en grande al público local durante la semana, salió a por todas y se llevó un partido muy, muy sufrido (6-3 y 6-7 [5/7] y 6-2) por la fantástica resistencia del italiano, que remontó hasta siete pelotas de break en el segundo set e incluso llegó a tener dos bolas para llevarse el parcial al resto con 5-4. A la octava logró la rotura Nole llegando a una dejada en la que tuvo que estirarse como sólo él puede hacerlo. Parecía que lo tenía con 6-5 y su servicio, pero la respuesta de Sonego fue increíble. Pese a la tensión subió su nivel, remontó dos pelotas de partido y logró una contrarrotura para forzar el desempate. Los aficionados gozaron con el duelo. Lo dio todo el serbio, muy decidido y concentrado, y resistió con todo su rival, que también llevaba mucha fatiga, porque su partido de cuartos contra Rublev lo disputó por la mañana y superó las dos horas y media. Pero se llevó ese desempate que empezó perdiendo, y la amenaza continuó en el tercer set con un 0-40. Su aventura no fue más allá de milagro. Es uno de los héroes de esta edición de Roma. Esta semifinal fue un gran espectáculo que puede hacer crecer mucho al transalpino. Quería un duelo rápido Djokovic, pero sólo el segundo set duró 90 minutos. Acabó agotado, pero el serbio demostró que de cabeza está fresco. No perdió el equilibrio pese a las adversidades.

La apasionante jornada de sábado fue el preámbulo de lo que espera: el primer Nadal-Djokovic del curso, y además a dos semanas de que empiece Roland Garros, el gran objetivo que tienen ambos: Rafa para llegar al Grand Slam número 21 y Nole para intentar conquistar el décimo noveno y situarse a uno del español y de Federer. También será el primero desde la paliza que le dio el español en la última final de París, disputada el pasado otoño. «Lo que pase aquí no hará una gran diferencia para las próximas semanas. Creo que ya he hecho mi trabajo para Roland Garros», opinó el balear, tratando de quitar presión al duelo. Djokovic es el tenista que más veces ha vencido a Nadal en tierra batida: hasta en siete ocasiones. Tres de ellas han sido en Roma, otra en Montecarlo, otra en Madrid y otra en París. Eso sí, la última vez fue en 2016. El zurdo le ha superado 18 veces en polvo de ladrillo.