Liga de Campeones

El Atlético tendrá que seguir esperando a la Champìons

Se cae en Dortmund después de remontar y de verse clasificado. Ahora que se cumple el 50 aniversario de su primera final, la inspiración de Sabitzer lo deja en el camino

Dortmund (Germany), 16/04/2024.- Atletico's Antoine Griezmann (L) reacts after the UEFA Champions League quarter final, 2nd leg match between Borussia Dortmund and Atletico Madrid in Dortmund, Germany, 16 April 2024. Atletico Madrid lost 4-5 on aggregate. (Liga de Campeones, Alemania, Rusia) EFE/EPA/CHRISTOPHER NEUNDORF
Griezmaan y Koke, tras la eliminaciónCHRISTOPHER NEUNDORFAgencia EFE

A Marcel Sabitzer se le echó el tiempo encima y la defensa entera del Atlético nada más comenzar el partido. Adeyemi llegó hasta la línea de fondo y le puso la pelota en el pie con tanta ventaja que el centrocampista del Dortmund pensó que tenía la vida entera para pensar por dónde quería meter el gol. Le tapó la defensa una de esas oportunidades que cualquiera se queda rumiando todo el partido.

Pero Sabitzer, no. Después de que el Atlético se sintiera de nuevo en semifinales le dio el golpe definitivo. Fullkrug puso por delante al Dortmund. Y sólo tres minutos más tarde, Sabitzer dio por liquidado el cruce con un disparo desde fuera del área en el que Oblak puso más vista que manos. Estuvo cerca el austriaco de marcar incluso el quinto en otro fuerte disparo que, esta vez sí, el guardameta esloveno despejó a córner.

El Atlético terminó como empezó. Medio asustado y encerrado en su campo, vencido por la presión del Dortmund. Hundido. Simeone lanzó desde la alineación el mensaje que le pide el cuerpo cada vez que se ve con ventaja en un partido o en una eliminatoria. Le faltaba Lino, sancionado, en el lateral izquierdo y la respuesta del entrenador del Atlético fue situar a Azpilicueta en ese costado. Como es costumbre, le preocupaba más defender que atacar. Y eso casi siempre le sale mal desde aquella eliminatoria de Liga de Campeones contra el Real Madrid en la que metió a Giménez para defender en el minuto 86 y dos después Chicharito marcó el gol que eliminaba al Atlético.

La naturaleza del Cholo es esa, aunque a veces intenta corregirla con los cambios. El Atlético sufría los arreones del Dortmund, que se había puesto 2-0 en cinco minutos cuando se acercaba el final de la primera mitad. Marcó Brandt, en una posición complicada y sin mucho ángulo con un disparo de los que Oblak suele parar. Y después Maatsen puso el segundo con otro disparo parecido.

En el descanso Simeone cambió los laterales, metió a Riquelme por Azpilicueta y a Barrios por Molina para que Llorente ocupara el carril. Pero el partido lo cambió Correa.

El argentino sustituyó a Morata, que había respondido con un error en el mano a mano al primer fallo de Sabitzer. Y después de que al Atlético le ayudara la suerte en el remate de Mario Hermoso que Hummels mandó a la portería y de un disparo que se le marchó pegado al palo precedido de un espectacular reverso en el área, marcó el gol del empate. Por insistencia y por ganas, porque enganchó un pelota que le llegó de un rebote y la puso adonde no podía llegar Kobel.

El Atlético seguía buscando a Griezmann, pero en ese momento se sintió capaz de desafiar al Dortmund, a sus malas costumbres fuera de casa y al Muro Amarillo, que botaba en el fondo del Westfallen Stadion. El partido echó a correr y ahí el Atlético no respondió. La contundencia del Dortmund fue mayor y apareció Sabitzer para liquidar el partido.

Pasaron tres minutos entre que puso el tercero en la cabeza de Fullkrug y marcó el cuarto, el que acabó de liquidar al Atlético. El de Fullkrug fue uno de esos que se veían en los resúmenes de la Bundesliga en los 80. Un centro desde la banda y un remate del delantero que se adelanta a la defensa. En realidad Fullkrug parece sacado de aquella época. Como si se hubiera parado el tiempo para él.

El Atlético ya no pudo sobreponerse al cuarto. Ahí ya supo que la Liga de Campeones se le había vuelto a escapar. En menos de un mes se cumple el 50 aniversario de su primera final, aquella del gol de Luis que le hizo verse levantando la primera y que anuló el zurriagazo de Schwarzenbeck. Aquella final cambió la vida de los dos equipos. Fue la primera del Bayern, que desde entonces ha ganado cinco más. El Atlético sigue esperando la primera y no será este año cuando vengue a aquellos jugadores que le hicieron rozar la gloria en el 74.

En Dortmund hizo lo más complicado. Igualó primero la eliminatoria y después, el partido. Y después llegó el desastre. Sabitzer le devolvió a la realidad con un par de impulsos de inspiración. Y el sueño que tuvieron aquellos pioneros hace cincuenta años tiene que seguir esperando.