Fórmula Uno

La estrella que quiere Mercedes se llama Fernando Alonso

El asturiano acaba contrato con Aston Martin a final de 2024 y ya está negociando su futuro

Alonso, en el pasado Mundial
Alonso, en el pasado Mundial@AstonMartin

Hacía años que la F-1 no vivía un momento tan convulso en su mercado de pilotos. El movimiento de Hamilton hacia Ferrari o el de Ferrari hacia Hamilton, según se mire, ha provocado que muchas negociaciones que ya estaban en marcha adquieran otra perspectiva. Mercedes se siente traicionada por el inglés, ya que después de ganar seis títulos con ellos y marcar una era pensaban que sería una especie de embajador de la marca una vez que se retirara de la competición. Nada de eso. El británico, y su representante, han querido buscar aires nuevos y firmar un último contrato, que podría ascender a 100 millones de euros si se cumplen objetivos muy ambiciosos, antes de coger el camino a casa. Un camino que puede prolongarse mucho en el tiempo y si no ahí está el ejemplo de Fernando Alonso con 42 años.

Con la decisión de Hamilton de unirse a Ferrari a partir del 1 de enero de 2025, el asiento que queda libre en Mercedes adquiere mucha importancia porque la escudería alemana necesita una figura con notoriedad pública, experiencia y la suficiente capacidad para llevar al equipo a lo más alto de nuevo. Y en esa lista que maneja Toto Wolff, jefe de equipo, mal que le pese, está Alonso.

El asturiano ha demostrado que con un monoplaza competitivo todavía puede hacer muchas cosas. Acaba contrato con Aston Martin a final de 2024 y lo cierto es que el proyecto está muy bien armado y cuenta con el apoyo financiero suficiente. Fue un movimiento, desde Alpine, para mantenerse en la F-1 algún año más y resultó ser una de las mejores decisiones del piloto español en años. Pero Mercedes es Mercedes y se da por seguro que Alonso está en las quinielas para sustituir a Hamilton y acompañar a Russell, que todavía no tiene los galones suficientes como para liderar el equipo.

Las otras opciones que maneja Wolff son Carlos Sainz, que tenía muy avanzada su renovación con Ferrari, pero también urde otro plan con Audi que ahora toma mayor protagonismo; Alex Albon, Esteban Ocon, que ya fue piloto de Mercedes y opciones más atrevidas como algún intento loco con Max Verstappen, Óscar Piastri o recuperar de su retiro al alemán Sebastian Vettel. Este último caso basado en la ola de confianza que ha provocado Alonso con su rendimiento y a su edad. Desde Mercedes transmiten cautela, aunque ya están negociando con todas las opciones posibles y no se descarta ningún escenario, incluso un intercambio de pilotos en la segunda mitad de la temporada entre Hamilton y Sainz.

Fernando Alonso tiene en su contra que está muy bien en Aston Martin, su edad (44 en 2025) y el veto que le impuso la cúpula de Mercedes en 2007 cuando su disputa con Ron Dennis y Hamilton en McLaren acabó con una multa de 100 millones de dólares que debieron pagar a medias tanto McLaren como Mercedes, que era el suministrador de motores y estaba inscrito formalmente dando nombre al equipo tras las acciones de espionaje de la escudería a Ferrari. Alonso confía en el rendimiento de Aston Martin en 2024 y en todo lo que pueda venir después también. De todos sus rivales directos es el que menos tiene que perder y eso le dará una gran ventaja a la hora de negociar en un mercado agitadísimo.

La guerra de Red Bull

El anuncio del fichaje de Hamilton por Ferrari ha provocado tensión en escuderías como Mercedes o Red Bull. El inglés es conocido por arrastrar a sus equipos personal con el que ya ha trabajado con anterioridad y se da por segura la marcha de algunos ingenieros a Italia. Además, a pesar del límite presupuestario, se da por hecho que Ferrari tiene preparada la billetera para gastar lo que haga falta para volver a ganar. El terremoto ha sido grande, pero no es nada en comparación con el que puede producirse el viernes o incluso hoy si se precipitan las cosas. Desde Red Bull se informó esta semana que su principal responsable, Christian Horner, estaba siendo investigado por una conducta inapropiada (se especula con demasiada exigencia laboral, aunque también con, presuntamente, mensajes de índole sexual) con una trabajadora del equipo. El viernes hay una audiencia interna que resolverá el asunto. La noticia la publicó el medio holandés que habitualmente tiene la mejor información de Verstappen, con lo que el tricampeón está en el punto de mira por haber filtrado la noticia para sacar algún beneficio. Si Horner sale podría liberar de su contrato a Adrian Newey, que podría tomar el camino de Ferrari, oferta que ha rechazado en varias ocasiones. Pero nunca es tarde y menos si desde Maranello están dispuestos a inyectar más dinero. En Red Bull se ha desatado una lucha interna por el control del equipo. Tras la muerte de su creador, Dietrich Mateschitz, quedó al cargo de la compañía su heredero. Y esta combinación está siendo explosiva. Los intereses son altísimos y en la F1 el juego sucio existe. No hay más que recordar la portada que el «News of the World» dedicó al antiguo presidente de la FIA, Max Mosley, publicando unas fotografías filtradas en plena orgía meses después de producirse la sanción a McLaren-Mercedes…