Pensiones

Los pensionistas ganan un 0,7% de poder adquisitivo

La inflación sube en diciembre por los carburantes. La media anual fue de un 0,9% mientras que las prestaciones se revalorizaron un 1,6%

El alza de la gasolina y el gasóleo son los causantes del comportamiento de los precios
El alza de la gasolina y el gasóleo son los causantes del comportamiento de los precioslarazon

La revalorización de las pensiones ligadas al IPC deja huella en el bolsillo de los pensionistas y en la Seguridad Social. El dato adelantado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) situó el índice de precios al consumo (IPC) de diciembre en el 0,8% interanual, lo que supone un repunte de cuatro décimas respecto a noviembre y la mayor tasa desde mayo por el alza de los carburantes. Con las cifras del año cerradas, la inflación media del año se situó en un 0,87%, es decir, un 0,9% tal y como informó el Gobierno en funciones en sus previsiones a Bruselas. Teniendo en cuenta que las pensiones se revalorizaron un 1,6% durante este año, los pensionistas han aumentado su poder adquisitivo un 0,7% en 2019. Pero esta supuesta «hazaña» ni siquiera corre a cargo del Gobierno, que en cambio si ostenta la autoría de congelar las pensiones por primera vez desde 2011, como ya sucedió con el expresidente Rodríguez Zapatero, aunque sea provisionalmente.

Todo radica en un simple cambio metodológico, aclara José María Rotellar, profesor de la Universidad Francisco de Vitoria. La subida de las pensiones de 2019 conforme al IPC fue la misma que la pactada entre el PP de Rajoy y el PNV antes de la moción de censura que protagonizó Sánchez. Un 1,6%, ni más, ni menos. Por aquel entonces, para revalorizar las pensiones se tomaba como referencia el dato interanual de noviembre, pero el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez cambió la forma de cálculo para apropiarse y justificar la subida. Ahora, la cifra de referencia es la media de las variaciones interanuales de 12 meses, de diciembre del año anterior a noviembre del año en curso. Sin embargo, pese a que la revalorización para 2020 (0,9%) coincide con el IPC, esta permanecerá en el aire debido a la interinidad del Ejecutivo, que el pasado 27 de diciembre anunció su congelación hasta «que haya un Gobierno con plenos poderes». Por lo tanto, ni siquiera se producirá, de momento, el incremento del 0,25% recogido por la Ley General de la Seguridad Social.

El alza de los carburantes, que caían en el mismo mes 2018 y, en sentido contrario, la bajada de la electricidad, han sido los responsables del comportamiento de los precios en el final del año. Tras cerrar 2018 en el 1,2%, la inflación empezó 2019 en el 1% y la evolución de la tasa anual del IPC se mantuvo al alza hasta abril, cuando alcanzó un 1,5%. A partir de ahí comenzaron a moderarse las subidas para bajar al 0,1% en septiembre y octubre, niveles más bajos en tres años. Pese al repunte de diciembre (0,8%), respecto al 0,4% de noviembre, la inflación se sitúa cuatro décimas por debajo del cierre de 2018.