Apagón

El operador francés de redes dice que las renovables son un riesgo para la estabilidad del sistema eléctrico

Considera crucial poder acceder a energía de origen convencional (centrales nucleares, térmicas e hidráulicas) que compensen la falta de sincronización de las renovables

Torres eléctricas y estación de energía
Torres eléctricasJesús G. FeriaLa Razon

El operador francés de redes eléctricas, RTE, considera que un sistema con un peso muy elevado de las energías renovables, como ocurre en la península ibérica, es un riesgo para la estabilidad, aunque insiste en que con lo que se sabe ahora no se puede atribuir a eso el apagón, pero tampoco excluirlo.

RTE, compañía de propiedad íntegramente estatal, marca distancias con el sistema ibérico por la predominancia de la eólica y solar, según un comunicado publicado este lunes para dar respuesta a algunas de las cuestiones que se han suscitado a causa del apagón del 28 de abril que sufrieron decenas de millones de abonados en España y Portugal.

A ese respecto, hace notar que la cuestión del mantenimiento de la inercia del sistema en función de la cuota de las renovables fue "un punto central" de un informe que hizo junto a la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en 2021. Y de hecho, afirma que eso fue una de las razones que le llevaron a "considerar desde el punto de vista técnico de mayor riesgo un sistema eléctrico que dependa únicamente o casi de las renovables, respecto a un sistema que conserve una parte significativa de energía nuclear".

Para evitar ese riesgo diferencial de un sistema como el ibérico había identificado en su informe "cuatro condiciones estrictas y acumulativas que ahora no se dan en la práctica, para un sistema eléctrico con una alta cuota de energías renovables".

Por una parte, poder acceder a energía de origen convencional (centrales nucleares, térmicas e hidráulicas) en otros puntos del continente europeo que compensen la falta de sincronización de las renovables (solar, eólica). Las otras dos condiciones eran prever reservas operativas y modos de gestión "muy sensiblemente diferentes a los de ahora" y reforzar las redes eléctricas.

En Francia, la generación nuclear representa alrededor del 70% de la electricidad y el presidente, Emmanuel Macron, ha lanzado un programa para sustituir los reactores actualmente en funcionamiento con seis nuevos que deberían entrar en servicio de aquí a 2050.En su nota, RTE recuerda que la eólica representó el 8,7% en 2024, la solar el 4,6% y que como máximo las dos juntas a lo largo del año llegaron a representar un 41% en un momento dado. Unos porcentajes muy inferiores a los de la península ibérica, como se esfuerza en señalar RTE, aunque constata que no dispone de elementos de que eso pudo ser la causa del apagón.

"Las investigaciones en marcha tendrán que analizar -subraya- en qué medida esa fuerte cuota de las energías renovables pudo tener un papel en la propagación del incidente". En los diversos escenarios que ha planteado para el futuro, el gestor francés de redes estima que la eólica y la solar juntas podrían subir hasta el 26-32% de la generación total en 2035, "un porcentaje muy inferior a los de numerosos países europeos ahora".

Sobre el delicado punto de las interconexiones con la península ibérica, que los sucesivos gobiernos españoles han tratado de impulsar con bastante poco éxito ante las autoridades francesas, RTE asegura que "está dispuesta a trabajar" para determinar "las condiciones técnicas y financieras" que permitan desarrollarla. Pero insiste en que eso necesitaría también reforzar en paralelo la red francesa "para garantizar una explotación segura de las interconexiones a largo plazo".

RTE recuerda que hay una nueva línea de interconexión en construcción por el Golfo de Vizcaya, que aumentará la capacidad de intercambio a 5.000 megavatios (actualmente es de 2.800). No obstante, con ese aumento el volumen de interconexión se quedará muy por debajo de los objetivos que fija la Unión Europea, que eran en 2020 de un 10% del consumo y que debería subir al 15% en 2030.

RTE estima que el plan de protección del sistema eléctrico francés funcionó bien el pasado día 28 de abril, ya que se desconectaron las interconexiones con España, lo que evitó la propagación del apagón al resto de Europa.

De esa forma, las repercusiones en Francia fueron "moderadas", con el apagón de algunas unidades de producción en el suroeste de Francia (en particular uno de los reactores nucleares de la central de Golfech, cerca de Toulouse) y cortes de corriente de menos de 20 minutos en el País Vasco francés.