
Vivienda
Los propietarios que pueden permitirse comprar una segunda vivienda cada vez tienen más dinero para hacerlo
El 66% de los compradores pertenecen a un nivel socioeconómico “alto o medio-alto”, mientras que en 2022 este porcentaje se situaba en el 40%, según Fotocasa

En un mercado en el que los alquileres superan los 1.000 euros mensuales, muchos consumidores prefieren hipotecarse antes que vivir toda su vida de alquiler. Sin embargo, hoy en día comprar una casa no está al alcance de todosy, en muchas ocasiones, puede considerarse hasta un bien de lujo por los bajos salarios y las condiciones tan exigentes que ponen los bancos para pedir una hipoteca. Estos datos contrastan con los que adquieren una segunda vivienda, que cada vez pueden permitirse inmuebles más caros.
Así lo explica el último informe realizado por Fotocasa, que destaca que el 66% de los compradores de segunda residencia pertenecen a un nivel socioeconómico “alto o medio-alto”. Al compararlo con datos anteriores, María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, destaca que hace dos años este porcentaje se situaba en el 40%, por lo que “existe un cambio relevante en la percepción del comprador de segunda residencia, en el que se reduce el obstáculo del precio de adquisición”.
Del mismo modo, Matos explica que, anteriormente, el 52% de los compradores eran de nivel socioeconómico medio, pero este porcentaje ha disminuido al 27% en 2024. "Este cambio refleja una mayor capacidad adquisitiva y un interés creciente en propiedades de mayor valor entre los compradores actuales", ha precisado Matos.
Inconvenientes para la adquisición de segundas residencias
Aun así, el precio todavía sigue siendo el principal inconveniente a la hora de adquirir un segundo inmueble para más de la mitad de los compradores (51%), el mismo porcentaje que en 2023. En el caso del alquiler el porcentaje se sitúa en el 48%, una cifra que se sitúa por debajo del 60% registrado el año pasado.
El siguiente obstáculo con el que se topan los compradores e inquilinos de segunda residencia es el propio estado de las viviendas, en un 35% y un 31% de los casos, respectivamente. En el caso de los compradores, la ubicación (22%) y la cantidad insuficiente de ofertas (21%) son citados por Fotocasa como dificultades que también son relevantes.
Por su parte, la escasa cantidad de oferta también es un inconveniente para los inquilinos, circunstancia compartida por el 32% de los encuestados, para los que el estado de las viviendas (31%) y su antigüedad (25%) también son otras dificultades añadidas.
Compras que se quedan a medias
Los que no logran comprar una segunda residencia se lamentan del desajuste entre los precios del mercado y su presupuesto (40%), mientras que otro 37% explica que no ha terminado la compra debido a la escasez de oferta en la zona en la que busca. Mientras tanto, en lo que a los inquilinos se refiere, el principal argumento que frena sus intenciones es el no haber encontrado una vivienda que se adapte a sus necesidades, cuestión que afecta al 31% de los consumidores.
Sin embargo, cuando la compra prospera, los consumidores tardan entre seis meses y dos años de media en decidirse antes de adquirir una segunda vivienda, por lo que podríamos decir que “se toman su tiempo” ya que no connota la misma urgencia que la adquisición de un inmueble destinado a vivienda habitual. Por su parte, los inquilinos demuestran mucha más agilidad en este sentido, ya que el 60% necesita menos de un mes para encontrar una vivienda de segunda residencia en alquiler.
✕
Accede a tu cuenta para comentar