Casado promete un “gobierno de salvación nacional” al estilo Draghi en Italia

Con las encuestas a favor y el efecto de la victoria de Ayuso en Madrid, el líder nacional del PP, Pablo Casado, se ve con fuerzas y posibilidad de arrebatar La Moncloa a Pedro Sánchez. Así se desprende de una entrevista que el popular protagoniza en el prestigioso diario económico Financial Times donde apuesta por formar “un gobierno de salvación” al estilo Draghi en Italia. Su idea es formar un ejecutivo con grandes nombres nacionales e internacionales con el objetivo de llevar a cabo a las reformas económicas y fiscales que el país necesita para superar la crisis económica derivada de la crisis sanitaria.

De hecho, entre las reformas que enumera el líder de la oposición figuran la bajada de impuestos sobre la renta y las sociedades, la abolición del impuesto de sucesiones, los cambios en la flexibilidad del mercado laboral o la simplificación del sistema de Gobierno. “Necesitamos un gobierno cuando asumamos el cargo. . . Prácticamente salvación nacional “, señala. “Necesitamos mucha experiencia, tanto a nivel internacional como desde diferentes perspectivas políticas; No solo conservadores, liberales y demócratas cristianos, sino también ex socialdemócratas. . . Un gobierno como el de Italia, pero elegido democráticamente”, explica en FT.

No es el único tema al que se refiere. Durante su conversación en el diario británico, Casado también se refiere a la pandemia. En su opinión, “las crisis fortalecen a los gobiernos incluso cuando manejan mal las cosas, y las secuelas los debilitan incluso si manejan bien las cosas”, por eso cree que la situación en la que va a estar España tras la pandemia aumentará sus posibilidades de llegar a la Moncloa.

Una de las preguntas obligadas es sobre si estaría dispuesto a formar gobierno con la formación que dirige Santiago Abascal tal y como dicen todas las encuestas publicadas hasta el momento que apuntan a la necesidad de pactar con Vox para gobernar. A este respecto, Casado afirma que “quiere gobernar solo” y subraya que el “PP no forma parte de un bloque con Vox”.

Además explica que reconoce que le dieron “por muerto” políticamente. “Era el tercero en todas las encuestas”, admite. Su prioridad en 2018 era que Ciudadanos no diera el “sorpasso” al PP, y de paso reunificar el centro derecha. “Con tres partidos a la derecha era imposible gobernar”, sentencia. Con Ciudadanos casi neutralizado, el líder nacional insiste en que su objetivo es llegar al poder para poner en marcha reformas.

Para ello, es necesario que se celebren elecciones generales, un escenario que no se vislumbra en un presente cercano ya que todavía queda más de un año y medio de legislatura, siempre y cuando no haya un adelanto electoral.