Encuentro

La dirección del PP de Madrid hace el vacío a Ayuso

Casado y la presidenta se reencontraron ayer. Ni García Escudero ni Camins la arropan en los actos de Navidad

La relación entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso se ha deteriorado hasta tal extremo que la mera fotografía de ellos dos juntos se ha convertido en una noticia que genera una gran expectación dentro y fuera del partido. Ayer se presentó el libro del ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy, «Política para adultos», y el interés estaba puesto en ver cómo el líder nacional y la presidenta madrileña escenificaban el reencuentro, tras acumular ocasiones en las que ha sido evidente que evitaban coincidir públicamente. Un distanciamiento externo que refleja la crisis que se ha cocido entre la dirección nacional del PP y el equipo de Ayuso a cuenta de la batalla por el control de la organización regional madrileña.

Hasta la foto de los dos, con Rajoy en medio, dio que hablar, porque hubo quien interpretó que la presidenta no quiso colocarse en el estrado al lado del líder nacional del PP. Se sintió la frialdad y el distanciamiento, y fue evidente que ninguno de los dos se había preparado el guion del reencuentro, pero también fue protocolo quien ordenó de esa manera el cuadro de la imagen.

En todo caso, es una fotografía que no cambia nada en relación a las tensiones entre Génova y el equipo de Ayuso. La presidenta vuela prácticamente sola en lo que afecta al apoyo de la estructura actual de la dirección del PP de Madrid, controlada por Génova. Puede interpretarse así, o también en el sentido inverso, es decir, que esa cúpula regional, que responde al mando de Génova, no pierde oportunidad de hacerle el vacío a la presidenta.

En el propio partido han tomado nota y observan con asombro cómo, por ejemplo, ni Pío García Escudero, presidente hasta el congreso regional, ni Ana Camins, secretaria general del PP de Madrid, acompañan a Ayuso en ninguno de los actos que está celebrando en estos últimos días con motivo de la Navidad.

El presidente del PP, Pablo Casado; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, a su llegada a la presentación del libro de Mariano Rajoy
El presidente del PP, Pablo Casado; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de Madrid y portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, a su llegada a la presentación del libro de Mariano RajoyIsabel InfantesEuropa Press
El presidente del PP, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso
El presidente del PP, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz AyusoDavid FernándezAgencia EFE

En general, esa falta de apoyo y sintonía se percibe «en todo», pero estas fechas lo hacen mucho más visible. Así, en las filas populares comentan cómo ni García Escudero ni Camins se han dejado ver por los actos de la presidenta y las tradicionales copas de Navidad a las que está asistiendo durante estos días, en localidades como Parla o Getafe. Hoy estará en San Sebastián de los Reyes, y la semana que viene tiene agendados otros tres municipios madrileños.

Hasta ahora, oficialmente se ha dado a entender que la cena de Navidad del PP de Madrid, en la que también tendrían que coincidir Casado y Ayuso, quedaba suspendida por la pandemia y el número de contagios al alza. Aunque es una justificación que contrasta con el resto de actividad del partido o con el hecho de que Ayuso sí que vaya a estar en la cena de Navidad del PP de Álava. Sin el tradicional encuentro navideño del PP de Madrid, evitan otra foto, parece que incómoda, entre Casado y Ayuso, y un cruce de discursos que podría haber sido políticamente incorrecto.

En los actos en los que está participando Ayuso sí se ha dejado ver otro miembro de la dirección del PP de Madrid, el consejero de Política Municipal, Carlos Izquierdo, el único que, por cierto, salió la semana pasada a expresar su apoyo a la presidenta ante la información sobre la colaboración de consejeros del Gobierno madrileño con la dirección nacional.

Ayer, tras varios meses de desencuentro, Rajoy forzó una foto en la que Casado y Ayuso no se esforzaron demasiado en poner sordina a la crisis, a pesar de que Génova insiste en darla por cerrada y ha pedido internamente que se guarde silencio. La tregua fue un simple posado, y apenas unos minutos de conversación ante un ejército de fotógrafos.

Durante el rato que compartieron en privado, con Rajoy delante, y en una sala anexa al espacio en el que se presentó el libro, tuvieron ocasión de hacer un poco más sólida la presentación de la supuesta tregua, pero siempre con otros interlocutores como mediadores en la conversación.

En su intervención en el acto de presentación del libro, Rajoy se refirió a Ayuso como ejemplo de valentía, y destacó su capacidad de tomar decisiones en momentos «muy difíciles porque en los fáciles las tomamos todos». Dijo también que confía en que Casado asuma pronto la Presidencia del Gobierno por «el bien de todos». El ex presidente arremetió contra la «nueva política» y el populismo.

El congreso regional no se celebrará antes del próximo mes de marzo y las dos partes pretenden aprovechar el tiempo que falta para ganar el mayor número de apoyos ante ese cónclave.