El pacto con Marruecos no frena la llegada de pateras: 289 inmigrantes rescatados en Canarias

Una de las aristas del pacto con Marruecos está relacionada con la llegada de inmigrantes de manera irregular a las Islas Canarias. La decisión de Sánchez de apoyar el plan marroquí –esbozado en 2007 por Rabat, aunque no implementado por el momento– para la que fuera colonia española hasta 1975 coincide con un repunte migratorio en los primeros tres meses del año y una tendencia que ha continuado una semana después del anuncio del giro de 180 grados respecto al Sáhara Occidental.

Salvamento Marítimo ha desembarcado esta madrugada en Lanzarote a los 52 ocupantes de una patera, que se suman a las 237 personas, una de ellas fallecida, llegadas a Canarias este fin de semana en embarcaciones precarias.

Según datos del Ministerio del Interior, la entrada de migrantes irregulares en territorio español a través de Canarias desde las costas marroquíes se incrementó un 115% en los tres primeros meses y medio de 2022 respecto al mismo período el año pasado. 5.552 inmigrantes llegaron al archipiélago, frente a los 2.580 del año pasado.

La ruta Atlántica es solo una de las vías de entrada irregular. Otro gran foco es Ceuta y Melilla, la entrada terrestre. Da la casualidad que los pasados 2 y 3 de marzo se produjeron en la valla de la ciudad autónoma con Marruecos dos saltos masivos protagonizados por jóvenes subsaharianos. Más de 4.000 personas protagonizaron las tentativas –especialmente nutrida fue la primera, con al menos 2.500 personas encaramadas a la verja– y 900 personas lograron acceder a suelo español. Días después hubo otra tentativa masiva, aunque el trabajo de las fuerzas de seguridad de los dos países la frustró. De hecho, según los datos del Ministerio, las entradas irregulares por esta vía aumentaron en lo que va de año un 289%. A nivel nacional, también han aumentado el número de llegadas, al registrarse un incremento del 76,9% de llegadas irregulares, es decir, se pasó de las 4.678 de 2011 a las 8.276, hasta el 15 de marzo de 2022.

De sobra es conocida la influencia que tiene Marruecos en el control de los flujos migratorio. En la retina permanece su decisión de abrir la mano y poner contra las cuerdas a España en mayo del año pasado cuando se produjo la gran avalancha en Ceuta como consecuencia de la decisión del Ejecutivo de acoger al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, en un hospital público de La Rioja para tratarse de covid.

Este viernes viaja el ministro de Exteriores José Manuel Albares a Rabat para reunirse con su homólogo marroquí, Naser Burita. Un viaje con el que ambos países escenificará el deshielo en la tensiones, al tiempo que servirá para conocer más detalles. En este sentido, el jefe de la diplomacia española anunció la semana pasada en comisión que una de las primeras consecuencias del acuerdo es la apertura de las fronteras terrestres, que llevan más de dos años cerradas, y que se reanude la operación Paso del Estrecho, paralizada también por la fricciones entre ambos países.