Cuenta atrás para la tumba de Queipo de Llano en la Macarena de Sevilla

Suele ser siempre un número similar. La última vez – hace solo unos días– unas 300 personas reclamaron en Sevilla que los restos mortales del general Gonzalo Queipo de Llano sean sacados de la Basílica de la Macarena de la capital hispalense, en un acto convocado por Sevilla por la República que reunió también a miembros de Málaga por la República.

Otras veces han sido la Plataforma Gambogaz –que pide la restitución de un cortijo en Camas adquirido tras una «oscura operación de compraventa»– y asociaciones memorialistas, en el mismo lugar, con pancartas e incluso pintadas amenazantes –«Los cofrades perecerán al lado del militar fascista»– pero fue tras la exhumación de Franco del Valle de los Caídos cuando con más fuerza insistieron en el desalojo del militar célebre por sus soflamas desde los micrófonos de Radio Sevilla. «Si el dictador ha salido del Valle de los Caídos, Queipo de Llano tiene que salir de un espacio de culto», dijo entonces la concejala de Adelante Sevilla en la corporación hispalense, Sandra Heredia.

Y en febrero asomaron también las consignas precisamente en un Pleno municipal a cuenta de la pregunta que IU y Podemos (Adelante Sevilla) le hizo al alcalde para que explicara su «grado de implicación» en el asunto. Antonio Muñoz (PSOE) respondió que ya había hablado con el hermano mayor macareno, José Antonio Fernández Cabrero; el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, y la consejera de Cultura, Patricia del Pozo.

Por su parte, la hermandad ha mantenido contactos informales con la familia del militar y dispone desde noviembre de 2020 de un columbario en la propia basílica al que podrían trasladarse los restos de Queipo de Llano y de su esposa Genoveva, enterrados en la misma capilla.

En sus últimas declaraciones a LA RAZÓN, Fernández Cabrero reaccionaba a unas palabras del secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez, en las que este aludía a una mudanza definitiva una vez esté en vigor la Ley de Memoria Democrática. El hermano mayor de la Hermandad recibía la noticia «con mucho gusto», puesto que su postura ha sido siempre la de acatar una norma que se pronuncie claramente sobre el posible traslado de los restos. «Hagan esa ley que nos dé instrucciones precisas», señalaba Fernández Cabrero, independientemente de si proviene del Gobierno central o de la Junta de Andalucía, informa Juan Diego Márquez.

Acerca del columbario, el hermano mayor puntualizaba que «no se construyó para trasladar ahí los restos de Queipo, sino para que reposen los restos de los hermanos difuntos». «¿Y si la familia de Queipo decide trasladar sus restos a otro lugar?», se preguntaba.

Sus descendientes también se pronunciaron ante este periódico en un sentido inequívoco: «Evidentemente se hará lo que decida la familia», que considera, según las cartas enviadas a diferentes medios, que el militar sublevado «salvó a Sevilla» de «caer bajo el dominio rojo» y fue un benefactor de la «infancia desvalida». Enterrado además en un lugar despojado desde 2009 de todos los símbolos del franquismo para dar a entender que reposa allí como hermano mayor honorario y por su contribución a la construcción del popular templo. Sus deudos, según parece, estarían a favor de lo que decida la Hermandad.

Lo que ahora ha cambiado es que la Ley de Memoria Democrática ya ha sido aprobada en el Congreso de los Diputados y solo resta un último trámite en el Senado, para después del verano. La legislación que los implicados estaban esperando es inminente. A este respecto, la última referencia es del regidor sevillano, Antonio Muñoz, que ha afirmado que «tarde o temprano» los restos de Queipo de Llano «saldrán de ahí»: «Espero que sea cuanto antes». En declaraciones a los medios, el alcalde hispalense, preguntado al respecto, señaló que si la nueva ley estatal es «explícita y no deja dudas de que personajes como Queipo tienen que salir de la Macarena, tendrá que hacerlo».

Para los Queipo de Llano, la legislación en ciernes supondrá además la pérdida del Marquesado otorgado por Franco al militar, pues la norma prevé eliminar 33 títulos nobiliarios del franquismo, incluido el suyo.

El tema del destino final de los restos del general llegó además al debate de investidura de Juan Manuel Moreno Bonilla. La portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto, reclamó que sean retirados de la Basílica de la Macarena porque «vamos muy tarde y hay muchas personas que sufren mucho con eso».