Marlaska prefiere renovar los trajes de gala de los policías en lugar de destinar esos 12 millones a chalecos antibalas

“A día de hoy sigue habiendo policías en la calle que salen a defender la seguridad de todos los ciudadanossin llevar un chaleco antibalas de dotación de la Policía Nacional, una situación que supone un grave riesgo para sus vidas, o sin una funda antihurto para evitar que pueda ser sustraída su arma reglamentaria”. Esta es la denuncia que, una vez más, pone sobre la mesa Pablo Pérez, portavoz del sindicato policial Jupol, y que llega tras saberse que le Ministerio del Interior, que dirige Fernando Grande Marlaska, ha aprobadouna partida de 12 millones de euros para renovar los uniformes de gala de la Policía.

A su juicio, “es una auténtica vergüenza y una nueva falta de respeto para el trabajo de los policías” que Marlaska, en un nuevo ejercicio de cinismo, dedique esta cantidad para renovar la uniformidad de gala de los agentes cuando debería centrarse en resolver las “deficiencias en los uniformes de trabajo y en los equipos de seguridad de los policías que están día a día en las calles”.

Desde este sindicato, recuerdan al ministro del Interior que entre sus objetivos, uno de los prioritarios debe ser el de “garantizar la integridad física de los policías”, por lo que el hecho de no disponer de los equipos básicos de seguridad o contar con equipos inadecuados,afectados por el deterioro o por el desgaste derivado del uso, repercute de forma negativa en el servicio y la seguridad de los agentes y, por ende, en la de todos los ciudadanos.

Por todo ello, Jupol señala a Marlaska que, con esos 12 millones de euros, Interior podría haber adquirido unos 20.000 packs de chalecos antibalas y fundas antihurto, para garantizar la seguridad de los agentes que se juegan la vida cada día en las calles. Y es que, tal y como aseguran desde esta organización sindical, los uniformes de gala se usan únicamente en actos protocolarios y no son una prioridad.

Denuncias en los tribunales: “Es sangrante”

Sobra decir que no es la primera vez que los policías, y en concreto este sindicato, denuncian la falta de medidas de protección de los agentes. Tanto es así, que son varias las demandas interpuestas en los tribunales contra la Dirección General de la Policía (DGP), precisamente, por no dotar de chalecos antibalas a los agentes.

En esas demandas, dejan claro que “la falta de estas medidas de protección individual es sangrante entre los agentesdel Cuerpo Nacional de la Policía, especialmente dentro de algunas brigadas como la de Policía Judicial, Extranjería o Información”. Una situación que, así lo señalan desde Jupol,contraviene el derecho intangible a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo, así como el artículo 63.1 de la ley de funcionarios civiles que recoge que “el Estado dispensará a sus funcionarios la protección que requieran para el ejercicio de sus cargos”.

En definitiva, consideran que la actitud de la DGP respecto a la dotación de chalecos antibalas supone una vulneración de los derechos fundamentales. Asimismo, aseguran que incumple la normativa de prevención y riesgos laborales, que su actuación es contraria a los principios de dignidad, seguridad, salud y protección laboral y vulnera los derechos inviolables que le son inherentes al policía en el desarrollo de su actividad profesional.