Acelerón del Gobierno: busca una aprobación “exprés” de la reforma del delito de sedición

El Gobierno quiere darle un acelerón a la aprobación de la reforma del delito de sedición. En el bloque de la investidura calculan que la modificación del Código Penal puede estar lista para finales de diciembre como muy tarde y PSOE y Unidas Podemos se han puesto ya manos a la obra con ese objetivo, a tenor de lo que han decidido este lunes en la Junta de Portavoces: han fijado una nueva Junta extraordinaria para el jueves o viernes de esta semana para así tener la posibilidad de convocar un pleno extraordinario para la semana que viene (se celebraría a continuación del de los Presupuestos Generales del Estado) y poder celebrar la primera votación de la proposición de ley.

En ese pleno de la próxima semana se celebraría la primera votación de la reforma del delito de sedición (toma en consideración). A partir de aquí, según explican fuentes parlamentarias del bloque de investidura, quedaría otro debate por delante: las enmiendas a la totalidad que puede presentar la oposición, que deberían ser de texto alternativo y ahí el PP podría plantear lo que ha anunciado este lunes Alberto Núñez Feijóo, que pasa por mantener el delito de sedición y crear un nuevo tipo penal para los referéndums de independencia. Luego ya vendría la ponencia con la negociación de las enmiendas parciales, el dictamen en comisión y el pleno para votar el texto enmendado. En este escenario, la reforma del Código Penal recibiría luz verde a finales de diciembre en el Congreso y en enero pasaría al Senado, aunque hay quien atisba que los plazos se podrían acortar todavía más.

Lo que sí ha habido ha sido un alineamiento de todos los grupos del bloque de la investidura para forzar esta aceleración de la tramitación de la proposición de ley: en este sentido, hasta el PNV ha optado por retirar sus propuestas legislativas para que no entorpezcan la votación de la reforma de la sedición en el próximo pleno.

En todo caso, el proceso de enmiendas parciales va a ser determinante para ver si es posible este acelerón de los tiempos: la clave de todo va a estar previsiblemente en la reforma de la malversación, que es lo que puede generar alguna discrepancia entre los partidos implicados. El PSOE se ha abierto a reformarla tal y como pide Esquerra y Podemos ya ha señalado cuál es el camino: diferenciar entre malversación orientada al lucro personal y malversación causada por un uso inapropiado de los recursos públicos (sería el caso de los dirigentes independentistas porque se les acusa de malgastar dinero en actividades dirigidas a la ruptura con España).

De esta manera, la reforma de la sedición va a estar más pronto que tarde y depende de cómo quede puede tener más de un beneficiado accidental: además de los condenados por el “procés”, también el expresidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, quien está condenado por malversación y se considera que no obtuvo un lucro personal.