Exteriores

Las aduanas de Ceuta y Melilla, a un paso de su apertura

Está previsto que retomen su actividad antes de la reunión de alto nivel

Taxis esperando a clientes que salen de Ceuta por el paso fronterizo del Tarajal, que conecta la ciudad autónoma con Marruecos.
Taxis esperando a clientes que salen de Ceuta por el paso fronterizo del Tarajal, que conecta la ciudad autónoma con Marruecos.Mohamed SialiAgencia EFE

La reapertura de las aduanas comerciales de Ceuta y Melilla podría ser inminente. Varios factores apuntan en este sentido. El primero de ellos es la resolución de la Dirección General de Salud Pública, publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), por la que se establece el listado de puestos de control sanitarios para llevar a cabo los controles de las mercancías de consumo o uso humano. Un listado que contempla, por el momento, el paso de pescado, crustáceos y cefalópodos frescos y caracoles terrestres vivos. Es decir, el pescado de Marruecos volverá a entrar a Ceuta a final de enero. Además, están las últimas declaraciones de sendos delegados del gobierno de Ceuta y Melilla, que en las últimas horas se refirieron a este asunto, vital para reactivar la economía de las dos ciudades autónomas.

La delegada del Gobierno melillense, Sabrina Moh, al igual que hiciera el pasado lunes su homólogo ceutí, aseguró ayer que la reapertura de la aduana comercial en ambas ciudades se va a llevar a cabo de forma «gradual, ordenada y sobre todo simultánea» y, añadió, a través de Twitter, que se está trabajando para que se produzca «una primera expedición comercial en los próximos días». Según sus palabras, servirá para, entre otras cuestiones, comprobar el funcionamiento de ambas aduanas comerciales y «para ir trabajando, de manera coordinada y progresiva, para aumentar la frecuencia de productos que van a transitar por ambas ciudades».

Todo apunta, por lo tanto, a que antes de que se celebre la primera reunión de alto nivel (RAN) –en la que no participarán miembros de Podemos– en siete años los próximos días 1 y 2 de febrero en Rabat, estarán abiertos sendos pasos de mercancías. De esta manera, con tan solo unos días de diferencia, se cumplirán dos de los puntos incluidos en la hoja de ruta que detalla las nuevas bases de la relación hispano-marroquí y los puntos de acuerdo en las relaciones bilaterales.

La puesta en marcha de esta frontera no es baladí ya que la apertura de sendas aduanas comerciales con Ceuta y Melilla, medida de profundo significado político, supondría el reconocimiento indirecto de la soberanía española sobre esas dos plazas africanas por parte del reino alauí. La aduana de Melilla se cerró de manera unilateral en 2018 tras más de seis décadas funcionando y se interpretó como un paso más en la intención del país vecino de asfixiar la economía de la ciudad. Alrededor del 70% de las mercancías que entraban a Melilla pasaba a Marruecos, parte de ellas por la aduana, aunque también un volumen importante lo hacía en grandes bultos cargados por porteadores en la frontera del Barrio Chino, el denominado comercio atípico. En el caso de Ceuta, nunca existió un paso regular terrestre de mercancías.

«El País» publicó ayer que la fecha de apertura será probablemente el próximo miércoles 25 de enero, «salvo cambio de última hora». Por lo tanto, de ser así se cumplirán los plazos establecidos por los gobiernos de España y de Marruecos, que en el mes de septiembre anunciaron desde Nueva York durante un encuentro bilateral entre José Manuel Albares y su homólogo marroquí, que se abrirían a «lo largo del mes de enero».