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Tribunales

Ábalos vuelve al Supremo tras el sainete sobre su abogado y con la amenaza de la cárcel

Ábalos no elude la cita, enfada al juez y a la Fiscalía y queda en manos de su hasta ahora abogado, que acudirá a asistirle si así lo precisa

José Luis Ábalos a su llegada al Tribunal Supremo Gonzalo Pérez PHOTOGRAPHERS

José Luis Ábalos vuelve este miércoles al Tribunal Supremo. Es la cuarta vez que el exministro de Transportes declara en el caso Koldo aunque, a diferencia de las anteriores ocasiones, esta vez lo hace con auténtico temor a que el magistrado Leopoldo Puente le mande a prisión. Su comparecencia se produce menos de 24 horas después de que el juez advirtiera un "fraude de ley" con el sainete de la renuncia de su abogado y la posterior petición de uno de oficio, con el que pretendía eludir la citación.

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Fuentes de la investigación confirman a LA RAZÓN que los últimos movimientos de Ábalos han irritado profundamente al magistrado y a la Fiscalía Anticorrupción, partidaria también de mantener las comparecencias del exidirigente socialista y de Koldo García. Son muchas las incógnitas acerca de cómo discurrirá la sesión de este miércoles, pero lo que está claro es que José Aníbal Álvarez, su hasta ahora abogado, acatará el mandamiento judicial y acudirá a asistirle.

Es más, en la tarde del martes, tras acordar el juez el mantenimiento de la citación, Álvarez contactó con el exministro, si bien al cierre de la edición de este periódico no había obtenido respuesta, según las fuentes consultadas. Por ese motivo, se antoja muy difícil anticipar lo que pueda pasar de puertas para dentro del alto tribunal, máxime teniendo en cuenta las condiciones en las que se celebraría el interrogatorio.

Su abogado cumple el mandato judicial

En cualquier caso la ausencia de declaración no evitará la celebración de la comparecencia contemplada en el artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, conocida como la vistilla de prisión. Como adelantó este medio, las acusaciones populares, que litigan bajo el paraguas del Partido Popular, no descartan pedir prisión provisional. Al contrario, algunas como Liberum y Hazte Oír ya ha avanzado que lo solicitarán ante la aparición de nuevos indicios recogidos en el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.

Precisamente, el temor a correr la misma suerte que Santos Cerdán ha llevado a Ábalos a tratar de dilatar lo máximo posible este trámite. De hecho, desde que el juez les convocara a una nueva declaración, se activó la maquinaria para suspenderla. Primero fue la defensa de Santos Cerdán la que pidió el aplazamiento por coincidirle con otras diligencias, pero el magistrado cerró la puerta avisando que esta es una causa con preso y no pueden haber dilaciones indebidas.

Tras ello, Ábalos barajó dejar el acta de diputado para conseguir así que la causa pasara a la Audiencia Nacional. Se trata de una propuesta que puso sobre la mesa su hasta ahora abogado, consciente de que Puente le va a procesar en breve por la pieza de las mascarillas y que cuando eso pase ya no habrá vuelta atrás. Sin embargo, Ábalos rechazó optar por esa vía. Tomó la decisión tras reunirse con Koldo y con su abogada, sin que sus propios letrados lo supieran.

El juez se planta

De hecho, este fue el detonante de la ruptura de la relación entre Ábalos y su letrado, aunque el conflicto viene de lejos. El primer gran choque se produjo en junio con motivo de su tercera comparecencia. Entonces se abrió la puerta a alcanzar un pacto con Anticorrupción, toda vez que la UCO estrechó el cerco al presunto cobro de mordidas de los imputados. Sin embargo, Koldo frenó cualquier intento de confesión de su antiguo jefe, que finalmente improvisó una declaración exculpatoria.

Con este caldo de cultivo, Ábalos rompió la baraja el lunes y pidió a su abogado que renunciara a su defensa, hecho al que este se negó en rotundo por estar a las puertas de una citación judicial. En consecuencia, fue el propio político quien, por vía de su procurador, comunicó al juez la ruptura con Álvarez. Horas después, en la mañana de ayer, pidió al alto tribunal que le designara un abogado de oficio, para cumplir con el mandato judicial y poder declarar con las garantías necesarias.

Sin embargo, el magistrado le respondió en tiempo récord que no solo no iba a acceder a su pretensión, sino que estaba actuando con "fraude de ley" con la única finalidad de dilatar la causa, en consonancia con lo informado por este medio. El magistrado le conminó a comparecer con su hasta ahora letrado al no haber justificado suficientemente los motivos de tan abrupta renuncia. Es más, recordó que Aníbal "ha desarrollado su labor de forma objetivamente irreprochable". Del mismo modo, le dio un plazo de tres días para que nombre a un nuevo letrado. De no hacerlo, entonces sí se procederá a designarle uno de oficio.

"Finalidades espurias"

El magistrado recordó el derecho fundamental que asiste al exdirigente socialista de recibir asistencia letrada, pero advirtió que este derecho está modulado por la obligación legal de rechazar las solicitudes que entrañen abuso de derecho. En ese sentido, Puente dejó claro que este es uno de esos supuestos y advirtió una instrumentalización de la causa "con finalidades espurias".

Además, no solo frenó la maniobra de Ábalos, sino que recordó que Koldo García empleó la misma táctica en junio cuando intentó suspender su comparecencia apelando al cambio de abogada, y que Santos Cerdán intentó igualmente tumbar las citas de esta semana alegando sus abogados que les coincidían con otros señalamientos. Al respecto, Puente constató la estrategia conjunta para "forzar la suspensión" y trazó las líneas rojas de un procedimiento que complica y mucho el horizonte penal de los investigados y de futuros actores que quedan por salir.

Los nuevos indicios de la UCO

De momento todas las miradas están puestas en el alto tribunal. El exabogado de Ábalos acudirá y le asistirá cumpliendo con el mandato del alto tribunal. El exministro, por su parte, podría aparecer solo o acompañado de un nuevo abogado. Este medio ha confirmado que en las últimas semanas contactó con numerosos penalistas, algunos de ellos incluso personados en esta causa. Ahora bien, lo previsible es que acuda sin un nuevo letrado defensor. De hacerlo, no se entendería que 24 horas antes pidiera uno de oficio.

Si quiere acceder a declarar, su hasta ahora defensa le asistirá con todas las garantías, aunque es probable que en estas circunstancias opte por guardar silencio. En cualquier caso lo que está claro es que el juez celebrará la vistilla de medidas cautelares si así lo piden las acusaciones. Sobre Ábalos y Koldo (que desfila el jueves) pesan en la actualidad las medidas de prohibición de salir de España, retirada de pasaporte y comparecencias quincenales.

Pero el último informe de la UCO complica su situación, toda vez que constata ingresos "irregulares y opacos" que provendrían de las supuestas mordidas cobradas con los amaños de contrato de obra pública. Además, se estrecha el cerco en la presunta repatriación de metálico desde Colombia por parte del hijo mayor del exministro. En ese sentido, las acusaciones que pidan cárcel apelarán a la aparición de nuevos indicios y a una posible destrucción de pruebas como supuesto para enviarles a prisión.