Pablo Iglesias busca diluir a Yolanda Díaz al alentar un frente de la izquierda liderado por Pedro Sánchez

La coyuntura electoral ha cambiado en cuestión de horas. Con la convocatoria de elecciones generales anticipadas para el próximo 23 de julio, el presidente del Gobierno obliga de facto a la vicepresidenta Yolanda Díaz a negociar con Podemos y hasta una quincena de partidos en tan solo diez días. La Junta Electoral obliga a la presentación de coaliciones en este plazo tras la convocatoria en el BOE de elecciones generales.

Esto ha cambiado de facto las negociaciones que hasta ahora estaban paralizadas entre Podemos y Sumar por la campaña para las elecciones autonómicas y municipales. Ambas partes ya están en ello y también el resto de partidos, según confirman parte de las formaciones implicadas.

El adelanto de elecciones generales ha sido analizado inmediatamente por el programa que dirige el exsecretario general de Podemos, Pablo Iglesias, con un matinal especial en Canal Red en el que si bien ha lanzado la idea de que “el espacio político de la izquierda tiene que ir unido a las elecciones”, ha hecho un segundo análisis en el que desbarata toda esta posibilidad y apunta a la vicepresidenta Díaz. Iglesias ha dado respuesta así a la escasa comunicación política ejercida por el partido. Un día después del descalabro en las urnas, la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha dado una declaración a los medios -sin preguntas- para confirmar que Podemos y Sumar ya han activado las negociaciones, pero sin concretar nada más.

Según Pablo Iglesias, que valoró la decisión de Sánchez de adelantar elecciones de “movimiento audaz”, el presidente podría estar pensando en otro “segundo movimiento” que pasaría por una pinza entre PSOE y toda su izquierda para concurrir a las próximas elecciones generales, con él de candidato ante un bloque de la derecha dividido en PP y Vox. “Teniendo en cuenta el sistema electoral en España, porque no una suerte de acuerdo del PSOE con el espacio de izquierdas para pactar e ir juntos en buena parte de las circunscripciones y así plantear una hipótesis aparentemente ganadora”, ha planteado en su programa. “La derecha dividida y Sánchez de candidato de un frente amplio progresista en la que el PSOE llevara en sus candidaturas a las fuerzas de izquierda”. De facto, esta posibilidad, en la que Sánchez aglutinaría todo el liderazgo de la izquierda y orillaría a la vicepresidenta Yolanda Díaz en su carrera política con destino a La Moncloa. “Esto a lo mejor no está en su cabeza”, ha matizado después “pero piensas que puede estar en su cabeza”.