Terrorismo

La Policía revisará las cintas de 12 cámaras de seguridad en busca de los asesinos del juez Querol

El juez Pedraz también ordena analizar las anotaciones manuscritas en el plano de objetivos de ETA que señaló el atentado contra el magistrado del Supremo

La explosión del coche bomba causó la muerte del juez del Supremo José Francisco Querol, su chófer y su guardaespaldas
ETA asesinó al juez Querol mediante la explosión de un coche bomba el 30 de octubre de 2000ENRIQUE CERDANAgencia EFE

Impulso procesal a la investigación por el asesinato del magistrado Juan Francisco Querol. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha ordenado a la Policía , a instancias de Dignidad y Justicia (DyJ) que le informe de si las imágenes grabadas ese 30 de octubre de 2000 por una docena de cámaras de seguridad de entidades bancarias y empresas fueron revisadas. Y, en caso contrario, insta a los agentes de Brigada Provincial de Información que las analicen «a la mayor brevedad» para esclarecer si es posible «identificar a alguno de los presuntos autores» del atentado, en el que además de Querol fueron asesinados su escolta, el chófer y un conductor de la EMT.

Así lo ha acordado el instructor en un auto al que ha tenido acceso LA RAZÓN, en el que además cita como testigos a la dueña del vehículo que el «comando Buruhauste» robó para utilizarlo como coche bomba y a dos personas a las que un día antes de la acción criminal les llamó la atención la insistencia de un hombre por aparcar su vehículo «justo donde se produjo la explosión» pese a la estrechez del espacio» (según declararon a la Policía tras el atentado).

Pedraz toma esta decisión después de interrogar la semana pasada a varios testigos presenciales que se refirieron a la presencia en el lugar de los hechos, tras la explosión, de dos hombres y una mujer que huyeron juntos en un coche (según la acusación, se trataría de los investigados Ana Belén Egües, Gorka Palacios y Juan Luis Rubenach, imputados junto a otros cuatro etarras por su supuesta responsabilidad del atentado.

La hija de Querol señaló a la etarra Egües

La hija del magistrado asesinado, Amalia Querol, también compareció ante el magistrado, a quien aseguró que reconoció a Ana Belén Egües como la mujer a la que vio en las inmediaciones de la casa de sus padres semanas antes de la acción criminal.

Ahora, el juez Pedraz quiere ratificar si en alguna de esas grabaciones se puede identificar a los autores del atentado. Pero no es la única diligencia acordada por el instructor, que además –también a petición de la acusación popular– quiere que se determine la autoría de las anotaciones halladas en un mapa intervenido a ETA en Merignac (Francia), que la organización terrorista utilizó hasta junio de 2008. En ese mapa (en el que figuran huellas del ex jefe «militar» de ETA Aitzol Iriondo y del etarra Joseba Troitiño), estaban señalados cinco objetivos, entre ellos el propio juez Querol. Para ello, insta a Policía y Guardia Civil a realizar (si no se hizo en su día) un «informe pericial de documentoscopia a los efectos de determinar la autoría de dichas anotaciones».

Asimismo, Pedraz ha pedido a los servicios de Información de ambos cuerpos que examinen, si no se hizo en su día, el contenido de una cinta de vídeo incautada al «comando Buruhauste» en el piso franco que utilizaba en Salamanca, que los terroristas guardaban con una anotación manuscrita: «Miembro del Tribunal Supremo Militar» (Querol era magistrado de la Sala Militar del alto tribunal).

La pista de la troqueladora

En esa misma resolución, también acuerda incorporar diversas diligencias de otras investigaciones a exjefes de ETA, entre ellas las declaraciones prestadas como testigos protegidos por dos etarras ante el juez Alejandro Abascal el pasado 3 de febrero, en las que corroboraron la responsabilidad de la cúpula de ETA en la decisión de asesinar a políticos como Gregorio Ordóñez o Miguel Ángel Blanco.

De momento, el juez no cita a declarar, «a la espera del informe de identificación», al etarra Ibon Echezarreta, exintegrante del «comando Erezuma», que robó una troqueladora por orden del entonces jefe «militar» de ETA Javier García Gaztelu, «Txapote», con la que se confeccionó la matrícula falsa del coche bomba utilizado para asesinar a Querol. Pero sí pide a las Fuerzas de Seguridad que le aclaren si esa troqueladora fue entregada por Francia en 2018 y, en ese caso, si se realizaron informes lofoscópicos.

Pedraz investiga en esta causa a los etarras Ana Belén Egües, Gorka Palacios, Juan Luis Rubenach, Iván Apaolaza, Javier García Gaztelu «Txapote», Juan Antonio Olarra Guridi, Ainhoa Múgica y Oier Goitia.