España, en llamas
Sánchez improvisa un pacto de Estado e incide en que las comunidades "son las competentes en incendios"
El presidente del Gobierno se compromete a poner todos los recursos necesarios del sistema nacional de Protección Civil para ayudar a apagar el fuego
El mismo modus operandi que durante la DANA. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha incidido este domingo en que las comunidades "son las competentes en la extinción de incendios" y ha ofrecido, de manera improvisada, un pacto de Estado para abordar la emergencia climática que interpele a todos los grupos políticos y a todos los sectores del país (empresas, sindicatos y sociedad civil).
El jefe del Ejecutivo, que ha interrumpido sus vacaciones y se ha desplazado a Orense junto al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para conocer de primera mano el estado de la crisis, se ha comprometido a poner todos los recursos necesarios del sistema nacional de protección civil para ayudar a apagar el fuego.
La idea del Gobierno es poner sobre la mesa en septiembre las bases de ese pacto para la adaptación a la emergencia climática, que apelará, ha dicho, a “todos los actores del país” y deberá quedar "fuera de la confrontación partidista". “Somos un Estado compuesto. Cada administración tiene sus responsabilidades. Además de lo urgente, trabajaremos para ofrecer todas las capacidades y garantizar una mejor respuesta a los ciudadanos”, ha asegurado el líder socialista.
Sánchez, en su primera intervención pública desde que se fue a Lanzarte hace dos semanas, ha trasladado sus condolencias a las familias de las víctimas mortales de los incendios que están arrasando cinco comunidades autónomas y ha mostrado su “solidaridad y empatía con todos los heridos y con la ciudadanía que ha visto arrebatado su modo de vida por las llamas”.
Durante su comparecencia, el jefe del Ejecutivo ha querido destacar el papel de los profesionales que trabajan en la extinción de los fuegos y en la protección de la población: “Quiero poner en valor la profesionalidad, el oficio y la dedicación de nuestros servidores públicos. El Estado somos todos y ese reconocimiento se extiende a todo el sistema de protección civil”, ha subrayado.
El presidente también se ha referido a los presuntos responsables de los fuegos, advirtiendo que “no puede haber impunidad” y ha avisado de que quienes los hayan provocado “tendrán que rendir cuentas ante la Justicia”. Además, ha vinculado la gravedad de la situación a la crisis climática.
El presidente politiza la crisis y trata de usarla a su favor llevándola al terreno ideológico frente al negacionismo de otros actores políticos. Lo cierto es que el contenido del pacto avanzado es etéreo, porque su objetivo es "redimensionar todas las políticas que afectan de una manera u otra a la emergencia climática".
Mientras, las comunidades afectadas le piden encarecidamente más medios. El presidente de la Xunta de Galicia, el popular Alfonso Rueda, que ha comparecido antes que el jefe del Ejecutivo, le ha requerido la intervención del Ejército, como ya hizo el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.
De la reunión entre Sánchez, Marlaska y el presidente gallego ha salido el compromiso del Ejecutivo de reforzar en Galicia el despliegue de los más de quinientos militares que el Ejército de Tierra tiene previsto movilizar. El Gobierno autonómico ha solicitado 200 efectivos adicionales, aunque todavía está por concretar cuántos se incorporarán finalmente.
Rueda ha advertido de que “quedan días muy duros” y ha subrayado la necesidad de investigar las causas de unos incendios “especialmente dañinos”, alimentados por corrientes que generan fuegos “explosivos” cuya extinción resulta “muchísimo más complicada”.
“La emergencia climática que asola el mundo es cada vez más grave y más asidua, sobre todo en lugares como la Península Ibérica. La ciencia lo viene explicando desde hace años”, ha zanjado Sánchez que solo ha concedido un turno de pregunta a la prensa antes de que un golpe de calor sufrido por uno de los presentes cerrara de manera abrupta la comparecencia.