La inesperada velada de Don Felipe VI en Mallorca sin Doña Letizia

El Rey Don Felipe VI ha acudido en solitario a Palma de Mallorca y ha disfrutado de una agradable velada con sus amigos en uno de los restaurantes más famosos de la ciudad, el italiano Sandro. El monarca, sin la Reina Doña Letizia y sin sus hijas, ha decidido ir a Baleares por voluntad propia y ha estado con su madre, la Reina Sofía, y su tía, la princesa Irene. Ambas llegaron hace unos días a Marivent para pasar la Semana Santa y acudir a la misa de Pascua de Palma de Mallorca, una de las tradiciones más emblemáticas de la Casa Real.

No se sabía a ciencia cierta los planes que tenían los monarcas para estas vacaciones pero lo cierto es que no se esperaba la visita de Don Felipe VI a Palma de Mallorca. La Princesa Leonor regresará a España el próximo 6 de abril de Gales para disfrutar de unas merecidas vacaciones de primavera. La heredera al trono volverá el 16 de abril, 10 días después, al UWC Atlantic College, internado en el que estudia, para afrontar la recta final de sus estudios superiores antes de comenzar su formación militar el próximo septiembre. En un principio, los planes de Semana Santa de la Familia Real española era esperar la llegada de la Princesa de Asturias, sin grandes planes para estos días. Por eso, la visita de Don Felipe VI a Palma de Mallorca en solitario, ha sorprendido tanto.

El Rey ha decidido tomarse unos días de desconexión con sus amigos y ha disfrutado de una deliciosa cena en Sandro junto a sus amigos. Al terminar la velada, Don Felipe VI se ha tomado una fotografía junto al dueño, Sandro Putignano. En la instantánea, ambos aparecen sonrientes y el monarca se ha mostrado de lo más cercano y familiar con los trabajadores del local y con el propietario del establecimiento. . "Fue un momento muy especial para todo nuestro equipo y estamos muy agradecidos por su visita", ha escrito el restaurante en sus redes sociales junto a la imagen.

Don Felipe VI, junto a sus amigos, degustaron de entrantes focaccia de romero, carpaccio de gambas y 'vitello tonnato'. Como plato principal, el monarca pidió pasta 'cacio e pepe' y, para terminar, compartió con sus amigos panna cotta y tiramisú. En esta breve pero intensa escapada, el Rey de España ha demostrar el amor y cariño que tiene por Palma de Mallorca, ciudad a la que no acudía en Semana Santa desde hace 4 años, tras la polémica de la misa de Pascua. El monarca ya se encuentra en Madrid y afronta estos días con ilusión para la inminente llegada de la Princesa Leonor a España.