Opinión

El diario de Amilibia: Y el fango burocrático, ¿qué?

¿Por qué son tan endemoniadamente inescrutables y complejos esos documentos? ¿Quién y qué inspiró a sus redactores?

Varias personas son atendidas en la Agencia Tributaria para presentar la declaración de la renta correspondiente al ejercicio de 2022, en la Administración de Hacienda de Montalbán.
Varias personas son atendidas en la Agencia Tributaria para presentar la declaración de la renta correspondiente al ejercicio de 2022, en la Administración de Hacienda de MontalbánCarlos LujánEuropa Press

El lector que tengo por ahí sabe de mi odio a la burocracia, a la que considero el gran enemigo del hombre auspiciado por los Estados. A ver si llega pronto Broncano a TVE y le pregunta a Marisu, ministra de Hacienda, si sabe hacer ella solita la Declaración. No la de amor incondicional al presi, que esa ya la doy por hecha y reafirmada, sino la de la Renta. ¿Por qué son tan endemoniadamente inescrutables y complejos esos documentos? ¿Quién y qué inspiró a sus redactores? ¿Lo intrincado y engorroso de esos papeles obedece al secreto deseo de alimentar el negocio de los asesores fiscales? Sé que Marisu está ahora atareada con la regeneración y la operación de limpieza emprendida por su Amado Líder, pero cuánto me gustaría preguntarle si la burocracia es, como dicen, el arte de convertir lo fácil en difícil por medio de lo inútil. No responderá: mi sino es hacerme preguntas que nadie contestará nunca, ay.

Una persona hace la declaración de la renta
Una persona hace la declaración de la rentaEduardo ParraEuropa Press

Dijo Balzac que era como una máquina gigantesca manejada por pigmeos y estoy con Borges cuando escribe: «Actualmente yo me definiría como un inofensivo anarquista; es decir, un hombre que quiere un mínimo de Estado y un máximo de individuo». Los expertos cuentan alarmados que por culpa de la burocracia excesiva y compleja, pymes y agricultores se han quedado sin las ayudas de los Fondos Europeos, y que, por ese mismo mal, los susodichos fondos no se sabe bien adónde van a parar, si están o no en el fondo del mar, matarile, rile, rile. Este inofensivo ácrata se pregunta si el barrido del fango burocrático entra en la regeneración democrática del Amado Líder. Dirán que sí, pero será que no.

El universo está lleno de materia oscura: el problema está en que no sabemos qué es, dicen los científicos. Miren en la Moncloa, porfa.